María Jesús Burgueño

Todos los días desaparecen obras de arte propiedad de particulares, museos, iglesias o instituciones. Estos hechos no siempre son denunciados en el momento. Es posible que pasen años antes de que los museos se percaten de la desaparición de alguna pieza de sus fondos. La Guardia Civil  tiene en Internet un sistema de consulta de las obras artísticas robadas estructurado en dos secciones diferentes con unas 400 fotografías: Documento PDF con objetos artísticos buscados que aún no han sido recuperados. Documento PDF con objetos artísticos recuperados de los que se desconoce su procedencia.

Hace unos días la Guardia Civil recuperó  el cuadro «La Aparición de la Virgen del Pilar» de Goya y «La Anunciación» obra del Greco que llevaban desaparecidos 14 años. Las pinturas, pertenecientes a una colección privada, se encontraban desaparecidas desde finales de los noventa tras su regreso a España de varias exposiciones internacionales de arte. Estas dos obras son bienes integrantes del patrimonio histórico español, de las que se desconocía su paradero desde finales de la década de los 90. El Grupo de Patrimonio Histórico de la Guardia Civil inició una investigación para determinar las circunstancias que rodearon los hechos, su localización, y en su caso, la recuperación de las obras. Una de las gestiones realizadas por los investigadores fue incluir fotografías de las pinturas desaparecidas en las base de datos de obras de arte sustraídas, tanto internacionales como las gestionadas por la Guardia Civil, con el fin de dar a conocer a los diversos cuerpos policiales la desaparición de las mismas, dificultando de esta manera su comercialización internacional. A pesar de esta circunstancia los ladrones intentaron vender las obras el pasado mes de octubre de 2010. Tras tener conocimiento los investigadores de la posible comercialización de las dos pinturas, se aceleró la investigación, siendo localizadas e intervenidas en un domicilio particular de la provincia de Alicante.

Entre las obras robadas y aún no recuperadas que tiene publicada en la web la Guardia Civil se pueden ver algunas como un conjunto de seis  dibujos realizados con lápiz y cera sobre cartón de Pablo Ruiz Picasso que desaparecieron hace un año de una casa particular asturiana. Estos dibujos sobre los pecados capitales que el artista realizó en 1933 están valorados en 8.000 euros cada uno.

Pero no siempre son pinturas y dibujos, también y aunque parezca inusual desaparecen piezas como un arco de piedra tallada con unas dimensiones aproximadas de dos metros de radio que estaba ubicado sobre un muro, esta estructura desapareció en 2006 de la Comunidad de Castilla-León. Y de Castilla La Mancha desaparecieron hace unos meses doce falos de piedra de 1,04 metro de altura cada uno de época romana.

Posiblemente la obra más pesada de todas las robadas haya sido “Equal-Parallel/Guernica-Bengasi”  1986, de Richard Serra con un peso de 38 toneladas.  Se adquirió en  abril de 1987, a través de la Dirección General de Bellas Artes,  por 450.000 marcos alemanes ( 36 millones de pesetas).La obra de Serra salío del Museo Reina Sofía entre el  22 y el 25 de noviembre de 1990 con motivo de unas reformas en el museo y  desapareció, y eso que no es nada sencillo ya que la forman cuatro bloques de acero cuyo peso ronda las 38 toneladas. De esta obra nunca más se supo por lo que se llegó a un acuerdo con el escultor para que realizara otra obra nueva y gemela  de “Equal-Parallel/Guernica-Bengasi” que actualmente se puede ver en el Museo Reina Sofía.

Unos días antes de terminar el año 2010 agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil participaron en una investigación contra el expolio de yacimientos arqueológicos que culminaron con la detención de 85 personas. La red dedicada al expolio operaba principalmente en Andalucía, si bien se desplazaban a otras comunidades autónomas para esquilmar yacimientos. En esta operación se recuperaron miles de piezas de diferentes tipos y datas, principalmente de la época romana, procedentes de distintos yacimientos y se  desmantelaron un completo taller destinado a la restauración y falsificación de los bienes expoliados. Estas piezas las ofrecian en  subastas privadas y subastas on-line a través de Internet. También se llevaba a cabo la venta directa a coleccionistas. Nueve meses antes la Guardia Civil en una operación llevada a cabo en la provincia de Cáceres, intervinieron más de 7.500 objetos arqueológicos procedentes del expolio de 14 yacimientos de las localidades cacereñas de Jaraiz, Monroy, Trujillo y Talayuela.

En 2009 la Guardia Civil detuvo  a una persona y recupó 67 documentos de gran valor histórico sustraídos en varias bibliotecas. Se trataba de Mapas y tratados cartográficos de los siglos XVI y XVII entre los que se encontraban varios Ptolomeos. Para mutilar las hojas de los libros el detenido utilizaba cuters que camuflaba entre sus objetos personales. Posteriormente las sacaba de la biblioteca ocultas en dobles fondos artesanales que él mismo confeccionaba.

Entre otras actuaciones a lo largo de estos años la Guardia Civil recuperó  cientos de manuscritos y otros documentos de un gran valor histórico que en su día pertenecieron a Niceto Alcalá Zamora, Presidente de la II República, y que habían desaparecido de una caja de seguridad de un banco de Madrid durante los años 1936-1937, tras el inicio de la Guerra Civil.

En el traslado se perdió la pista del cuadro «Niños en el Carretón» (1778) de Goya. Desapareció en el traslado entre el Museo de Arte de Toledo de Ohio y el Guggenheim de Nueva York en noviembre de 2006. La empresa profesional que se encargaba de su transporte se dio cuenta de la ausencia del óleo a la altura de Scranton (Pennsylvania). El Museo Guggenheim de Nueva York estaba encargado de todas las gestiones de préstamo temporal. El cuadro viajaba para parcipar en la exposición “Pintura española de El Greco a Picasso” organizada por la Sociedad Estatal para la Acción Cultural Exterior (SEACEX) y la Fundación Solomon R. Guggenheim. Finalmente y tras la intervención del FBI la obra pudo participar en la exposición.

Una de las versiones del cuadro El Grito y la Madonna del pintor expresionista noruego Edvard Munch desaparecieron del museo del artista en Oslo en 2005.  La versión más famosa de El Grito expuesta en el Museo Nacional de Oslo también fue objeto de un robo en 1994 y recuperada pocos meses después. Y este caso no es un caso aislado todos los días se descubren desapariciones en los museos de todo el mundo.

Sólo hace falta observar la página de los objetos desaparecidos que la Guardia Civil tiene publicados para darse cuenta que a los ladrones les gusta más los objetos religiosos o ¿quizá sean más sencillos de sustraer?. Hasta hace pocos años era muy normal encontrarse igleisas abiertas durante todo el día sin ningún tipo de vigilancia en cualquier punto de nuestra geografía. Hoy en día parece que los ladrones lo tienen un poco más difícil.

Las recomendaciones que la brigada especial de la Guardia Civil hace para proteger nuestro patrimonio son muy simples:  En primer lugar conviene evitar que personas ajenas a su círculo de amistades conozcan su colección de arte y se aconseja desconfiar de los posibles compradores que estén interesados en visitar el inmueble donde se guarden estas obras, ya que esta información puede llegar a grupos de delincuentes.

Los ladrones suelen actuar en los sitios menos protegidos. Si las obras de arte están en una vivienda en la que no  sea residencia habitual, es conveniente que se tasladen las piezas  a un lugar seguro. Por otra parte muchos de los robos se podrían evitar avisando a la Guardia Civil en el caso de observar a alguna persona en actitud sospechosa merodeando por los alrededores de alguna glesia o ermita con escasas medidas de seguridad, donde se conserven bienes culturales de gran valor artístico o histórico. Cualquier dato es importante como la matrícula del vehículo que utilicen los posibles delincuentes y de los rasgos físicos de ésto.

Por otra parte si tiene sospechas que una obra de arte que le estén ofreciendo puede ser procedente de robo, trate de obtener cualquier información sobre el vendedor y comuniquelo a la Guardia Civil. Es muy importante no adquirir obras de arte o antigüedades a personas que no den las debidas garantías, ya que indirectamente se puede estar fomentando el comercio ilícito de bienes culturales robados. Es conveniente que las compras de esta clase de objetos se realicen en establecimientos legales (comercios de antigüedades, salas de subastas, ferias) y exigir siempre una factura en la que figure una descripción de la obra que se está adquiriendo, nombre y dirección del vendedor, fecha y firma. Se debe sospechar de aquellas obras que se ofrezcan a un precio anormalmente bajo.

Cuando se adquiera una obra de arte es conveniente realizar algunas fotos que ayuden a identificar la pieza en caso de sufrir un robo. Este material fotográfico se podrá adjuntar a la descripcion, factura de compra o cualquier otro documento a la hora de presentar la denuncia.

Datos de interés:
Guardia Civil 062
Unidad Central Operativa (Grupo de Patrimonio Histórico) Email: uco-patrimoniohistorico@guardiacivil.es

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