El CA2M Centro de Arte Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid muestra a partir del 27 de abril una nueva exposición, Colección XVI. Escala, con obras escultóricas de su Colección y de la Colección Fundación ARCO. La muestra agrupa obras contemporáneas de dos momentos clave de la escultura en las últimas décadas: la tradición del minimalismo, y el arte conceptual internacional desde los años 70 y sus desarrollos en la llamada Nueva Escultura Española de los años 80.

La muestra cuenta con los artistas españoles Txomin Badiola, Pello Irazu, Ángeles Marco, Juan Muñoz, Miquel Navarro y Susana Solano, a los que se suman maestros internacionales como Carl Andre, Anthony Caro, Donald Judd, Richard Long, Mario Merz y Ulrich Rückriem.

La exposición continúa la línea de investigación ya iniciada por la institución sobre las formas de mostrar y los diferentes lenguajes museográficos. En esta ocasión, la selección sigue una tradición museística presente desde el nacimiento de los museos en el siglo XVIII y que consiste en la exhibición de esculturas en sus patios interiores, permitiendo que diferentes fragmentos de la historia del arte convivan en un mismo espacio diáfano con la intención de facilitar una mirada comparada. Para ello, el CA2M aprovecha el nuevo espacio abierto desde el pasado mes de diciembre, un espacio de gran escala que cuenta con luz natural y que ha hecho posible, por vez primera, la exposición de obras de gran formato de su Colección.

Entre las piezas que podemos encontrar en la exposición están Standing Stone Line (1987) de Richard Long (Bristol, Reino Unido, 1945), uno de los mayores exponentes del Land Art europeo y cuyas obras encajan dentro de lo que Rosalind Krauss definió en “La escultura en el campo expandido” cómo un término medio entre la arquitectura y el paisaje. Los dos escultores principales del arte minimalista americano, Donald Judd (Excelsior Springs, EEUU, 1928) y Carl Andre (Quincy, EEUU, 1935), permiten entender sus procedimientos industriales y con formas geométricas simples que se repiten en una línea seriada, en ejemplos importantes del movimiento en EE.UU.

Un representante de la evolución europea del minimalismo es Ulrich Ruckriem (Düsseldorf, 1938), también presente en la exposición, que introdujo en el patrón seriado la brutalidad del material con las marcas de corte de las máquinas en la cantera. Por su parte, Mario Merz (Milán, Italia, 1925), considerado uno de los maestros del arte povera de los años 60, realiza piezas que tienen algo de refugios y de ruinas, como el Igloo with Fibonacci Numbers (1994) donde el crecimiento casi orgánico de una pieza realizada con restos de mármol se relaciona con la proporción áurea del crecimiento natural de los procesos bilógicos.

En el Reino Unido, la escultura evolucionó en los años 80 hacia lo que se conoció como la Nueva Escultura Británica. Uno de sus padres generacionales fue Anthony Caro (New Malden, Reino Unido, 1924) en Table Piece Y-64 Sea Symphony, de 1985-1986, muestra esa nueva combinación de fuerzas, donde la obra adquiere una ambigüedad entre industrial y figurativa, donde la abstracción comienza a volverse gestual y adquirir nueva libertad formal. A la misma generación pertenece Juan Muñoz (Madrid, 1953), quien a lo largo de su carrera utilizó muñecos de ventrílocuo, maniquíes y marionetas. Del borrar, una obra temprana de 1986, presenta esa ilusión excesiva en el muñeco ante trompe-l’oeil forzado, desvelando el truco y la artimaña, la mentira obvia de la diferencia entre lo real y la representación que pone en cuestión el propio lugar del espectador.

En España el contexto cultural de comienzos de los 80 había explosionado y la imagen de renovación y la inflación del arte alcanzaría su momento álgido en 1987-88 y ese es precisamente el período al que corresponden la mayor parte de los fondos escultóricos españoles del CA2M. De Susana Solano (Barcelona, 1946) es Mar de Galilea (1986), una obra que se convierte en un espacio contemplativo para ser llenado con una referencialidad que ha de aportar el propio espectador. Precisamente esta manera de entender el espacio de exposición como una ceremonia vacía esperando la presencia del espectador para hacerla ocurrir es la característica fundamental de esta generación.

La muestra la completan dos escultores valencianos: Miquel Navarro y Ángeles Marco. Navarro (Mislata, 1945) obtuvo un enorme éxito en los años 90 con piezas públicas de fragmentos amplificados como en Cuberta de 1986. En el caso de Marco (Valencia, 1947), sus piezas representan una de las cimas de las tendencias neobarrocas de finales de los años 80 en España: obras como Ascensor oblicuo de 1987 o Puente de 1995.

Más información en: www.ca2m.org

La exposición se podrá visitar a partir del próximo 27 de abril en el Centro de Arte Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid