Desde el 1 de marzo al 3 de mayo de 2007
La exposición que presenta el Museo Reina Sofía la componen un total de 13 obras: dos esculturas en bronce, un altorrelieve en escayola, dos óleos y ocho dibujos, todas ellas con la viña como motivo central, algo que no es del todo nuevo en esta artista. Con esta muestra culmina un proyecto pensado desde hace años y que todavía no había tenido ocasión de realizar.
El mundo de la uva está ligado a las tabernas, vendimiadores, bodegas y a su vida en Sanlúcar de Barrameda: El proyecto trata sobre la pequeña viña que cuido –dice la artista- como si fuera un jardín y rodea mi estudio en La Jara, en Sanlúcar”. La novedad es que ahora aborda el tema en su esencia y plenitud, ofreciendo una dimensión desconocida hasta el momento. En torno al vino existen una iconografía y mitología complejísimas, desde la antigüedad hasta nuestros días, pero –como apunta Jacobo Cortina en el catálogo-, Carmen Laffón huye de culturalismos y costumbrismos vacuos para afrontar el tema con una renovada originalidad. La artista plantea el vino como un organismo vivo, que nace, se desarrolla y muere.
Los trabajos que componen la muestra son de grandes dimensiones, algo que sorprende teniendo en cuenta que Carmen Laffón suele trabajar en formato pequeño. Los dibujos a carbón con toques de témpera de “La Viña” están concebidos como un gran friso, se enlazan unos a otros formando ondas y creando un ritmo particular. En estas obras dominan los blancos, negros y grises; la técnica del carbón, que ya usaba a finales de los sesenta en retratos, alcanzan ahora nuevos matices gracias al aumento de la escala y la rotundidad de la expresión.
Las obras en Silos
Las esculturas están instaladas con un particular ritmo en el suelo, formando un conjunto en el que el círculo es la geometría predominante a través de las circunferencias de las cestas, las uvas y las curvas de la propia instalación.
Enfrentada a esas formas curvilíneas, encontramos la horizontalidad de la escultura la Mesa: un tablero alargado que sostiene objetos dispersos. La mirada indagadora de la artista convierte un útil de trabajo en una escultura. Lo mismo ocurre con la instalación Repisa, a través de la cual la artista hace un homenaje a Santo Domingo de Silos según el cuadro de Bartolomé Bermejo, una obra que cautivó a Carmen Laffón al conocer el Museo del Prado.
La muestra escultórica se completa con el altorrelieve de las Cepas, presentado en escayola y que se fundirá en bronce. Son dos cepas de moscatel, unidas mediante dos palos en el vértice superior, conformando un triángulo con el suelo. Los troncos no se elevan mucho de la tierra y los sarmientos trepadores están ya casi desnudos de hojas. Representa septiembre, el final de un ciclo: el de la producción y recogida de la uva, y el comienzo de otro: el del proceso de vinificación.
Para el poeta Jacobo Cortinas, con esta indagación en el mundo de la viña, Carmen Laffón «llega a los fundamentos naturales de las cosas, a la traducción de su esencia. Consigue la superación de los propios límites y se regenera en la belleza de los objetos». Para la artista «el silencio y recogimiento del espacio en el que se exponen, sin duda, favorecerá a la intención de la obra»
CARMEN LAFFÓN (Sevilla, 1934) tiene una larga trayectoria artística, caracterizada por practicar un realismo íntimo y atmosférico convocando un su obra luz y poesía. (ver Apuntes Biográficos…)
La inauguración de la exposición presidida por la propia artista, Carmen Laffón, tienen prevista su asistencia la directora del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Ana Martínez de Aguilar; el abad del Monasterio, Clemente Serna; el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Burgos, Antonio Méndez Pozo, y representantes de Corporación Empresarial ONCE, entidad patrocinadora de la muestra.
(Apuntes biográficos… La Viña… )
Datos de interés:
Abadía Benedictina de Santo Domingo de Silos
C/ Santo Domingo, 2
E-09610 Santo Domingo de Silos – Burgos
Teléfonos: 947 39 00 49 – 947 39 00 68