Se trata de una pintura gótica al temple sobre tabla, fechada entre los años 1440 y 1450, de la escuela de Girona y donde se representa la escena del Calvario de Cristo.
El ministro de Cultura, César Antonio Molina, ha hecho entrega al Museo Nacional de Arte de Cataluña de la obra El Calvario, una tabla procedente de un antiguo retablo que adquirió el Ministerio de Cultura por 330.000 euros y asignada a la colección permanente del Museo Nacional de Arte de Cataluña. El acto, que se ha celebrado en el MNAC, ha contado con la asistencia del secretario general de Cultura de la Generalitat de Cataluña, Lluís Noguera; del delegado de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Martí, y de Narcís Serra y María Teresa Ocaña, presidente y directora del Museo, respectivamente.
El MNAC cuenta con otros ejemplares importantes de este periodo, como la tabla de San Juan Bautista y San Esteban o la tabla de San Jaime. La obra del Calvario es de gran calidad en relación con los estándares catalanes de la época, y presenta un muy buen estado de conservación. La relevancia histórico-artístico de esta tabla le garantiza un lugar destacado en la exposición permanente del Museo Nacional de Arte de Cataluña.
La tabla se relaciona con el grupo de obras atribuidas a los pintores Joan Antigó y Honorat Borrassà, que trabajaron en Girona. Como otras obras de este grupo, el Calvario ilustra la gran calidad y originalidad de la pintura gerundense del gótico internacional. El hecho de que se hayan conservado escasos ejemplares de esta escuela incrementa el interés y el valor de la tabla, que enriquecerá de un modo decisivo la exposición permanente del museo.
La tabla, de 96 x 77 cm, presenta un buen estado de conservación y es una obra de gran calidad en relación con los estándares catalanes de la época. Su incorporación al MNAC también permitirá un exhaustivo estudio material, técnico y estilístico de la tabla y su examen comparativo con otras obras pertenecientes al mismo ámbito y período.