El Museo Picasso de Barcelona presenta su Programa de Exposiciones 2008/2009
Tras la muestra «Olvidando a Velázquez. Las Meninas», el Museu Picasso abrirá la temporada 2008/2009 con la exposición «Objetos vivos. Figura y naturaleza muerta en Picasso»
Completan el programa la primera retrospectiva en el Estado Español dedicada al artista Kees Van Dongen y la muestra de una selección de grabados de Picasso de temática erótica –que forman parte de los fondos del Museu–, en diálogo con grabados japoneses del siglo XIX
Una vez cierre las puertas la exposición «Olvidando a Velázquez. Las Meninas» (hasta el 28 de septiembre), el Museu Picasso abrirá la temporada 2008/2009 con la exposición de tesis «Objetos vivos. Figura y naturaleza muerta en Picasso», comisariada por Christopher Green, profesor del Courtauld Institute of Art de Londres y uno de los más reconocidos especialistas internacionales en la obra de Picasso.
«OBJECTOS VIVOS. FIGURA Y NATURALEZA MUERTA EN PICASSO»
Inauguración: 20 de noviembre de 2008
Abierta al público del 21 de noviembre del 2008 al 1 de marzo del 2009
La exposición presentará una cuidadosa selección de 70 obras realizadas por Picasso entre los años 1907 y 1933. En ella, Christopher Green plantea nuevas lecturas sobre determinados aspectos de la obra del artista, basadas en sus últimas investigaciones.
Es muy conocido el importante papel de la metamorfosis en los procesos creativos y en la repercusión de la obra picassiana, así como que la manipulación y la elasticidad de los signos han sido esenciales en esta vertiente metamórfica de Picasso. En cambio no ha sido nunca objeto de un estudio en profundidad la capacidad de Picasso para fluctuar en su arte entre la esfera de lo vivo y la de lo inanimado. A través de la concepción y transformación de sus ideas y gracias a la manipulación y a la metamorfosis de los signos, Picasso muestra, en estas obras, objetos que “viven” y figuras que se presentan tan “muertas” como meros objetos.
«KEES VAN DONGEN»
Junio – septiembre del 2009
Primera exposición antológica del artista Kees Van Dongen (Rotterdam, 1877 – Mónaco, 1968) en España, que quiere poner en valor la figura de este pintor sorprendentemente desconocido en nuestro país. Organizada por el Musée des Beaux-Arts de Montreal, el Nouveau Musée National de Mónaco y el Museu Picasso de Barcelona, y comisariada por Nathalie Bondil y Jean-Michel Bouhours, la exposición reunirá cerca de 100 obras de Kees Van Dongen, e incluirá un reducido número de obras de Picasso, testimonio de la relación entre ambos artistas.
Esta retrospectiva permitirá, por una parte, apreciar su obra de principios de siglo en París y sus claras conexiones con la de Picasso –con quien coincidió en el Bateau-Lavoir, a principios de siglo– y, por otra, mostrar su aportación fundamental al fauvismo. Aspectos más desconocidos y en ocasiones malentendidos de la obra de Van Dongen, como su interés por los temas orientalizantes o de referencias españolas, y parte del trabajo de su etapa final, centrado en los retratos de carácter mundano, también estarán presentes.
«PICASSO. GRABADO ERÓTICO»
Diálogo con estampas japonesas shunga, del siglo XIX
Febrero- diciembre del 2009
En marzo del 2008 se presentaron –con la propuesta «Picasso, linograbador»– las nuevas salas de la colección, dedicadas a mostrar, de manera periódica, el importante fondo de obra gráfica del Museu. Continuando con esta propuesta, a principios del 2009, estas salas acogerán una selección de grabados de temática erótica y sexual –propiedad del Museu–, realizados por Picasso entre 1964 i 1970.
Si bien toda la obra de Picasso está embebida en el erotismo y la sensualidad, se puede considerar que en dos períodos, el de sus inicios (1900-1908) y el del final (1964-1972) el artista se dedicó más intensamente a temas eróticos explícitos. Si en el primer período realiza apuntes y dibujos, crónica irreverente y autobiográfica de su juventud, en los grabados de su última época se puede constatar una gran variedad de encuadres, de perspectivas, de técnicas de representación que confieren tal fuerza a las imágenes representadas que convierte al espectador en el voyeur al que está destinada la escena.
La muestra incluirá, también, una reducida selección de estampas eróticas japonesas (shunga), del siglo XIX, con un claro paralelismo con las escenas representadas por Picasso, tanto por las similares soluciones compositivas, como por el tratamiento formal utilizado a la hora de describir el desnudo femenino y de explorar el deseo masculino y el acto amoroso