El Museo Nacional de Arqueología Subacuática estará regido por un Patronato
Un Real Decreto aprobado el pasado viernes 12 de septiembre establece los fines y funciones de esta institución, con sede en Cartagena, que se inaugurará el próximo mes de octubre
El Ministerio de Cultura ha invertido 18.675.537 euros en la construcción de la nueva sede.
Hace unos meses nos sorprendió el Ministerio de Cultura con la nueva denominación del hasta entonces Museo de Escultura que pasó a denominarse, desde el 6 de julio, Museo Nacional Colegio de San Gregorio. Ahora le ha tocado al Museo Nacional de Arquología Marítima que desde el pasado viernes 12 se llama Museo Nacional de Arqueología Subacuática, tras ser aprobado por Consejo de Ministros, a propuesta del ministro de Cultura, Cesar Antonio Molina, un Real Decreto que establece la regulación del Museo Nacional de Arqueología Marítima, que pasa a denominarse Museo Nacional de Arqueología Subacuática. El Real Decreto establece además del cambio de denominación, los fines y funciones del Museo, así como su órganos rectores que serán el Patronato y la Dirección.
El Museo, con sede en Cartagena y cuya inauguración está prevista para el próximo octubre, es de titularidad y gestión estatal, adscrito al Ministerio de Cultura. Con su apuesta por la innovación, accesibilidad y sostenibilidad nace con vocación de convertirse en un referente internacional de la renovación en la museografía de la arqueología subacuática, y en la puesta en valor y difusión de tan importante patrimonio cultural.
Composición del Patronato
El Patronato estará presidido por el ministro de Cultura y contará como vocales natos, con el presidente y consejero de Cultura, Juventud y Deportes de la Comunidad Autónoma de Murcia, la alcaldesa y el presidente de la Autoridad Portuaria de Cartagena, así como representantes de los Ministerios de Cultura, Asuntos Exteriores, Defensa, Interior, y Ciencia e Innovación. Además, el ministro podrá designar hasta siete vocales entre personas de reconocido prestigio y competencia en asuntos relacionados con el patrimonio subacuático. Este Patronato tendrá entre sus funciones, la de informar el nombramiento del director del Museo, en cumplimiento del Plan de Modernización de las Instituciones Culturales.
El origen histórico de este Museo se encuentra en la creación en el año 1970 del Patronato de Excavaciones Arqueológicas Submarinas. Posteriormente, en 1980, se creó el Museo y Centro Nacional de Investigaciones Arqueológicas Submarinas en Cartagena. En 1983, el Museo cambió su denominación por la de Museo Nacional de Arqueología Marítima.
Renovación total. En los últimos años se han sucedido diversos cambios en el terreno de la protección arqueológica subacuática que han afectado a esta institución. Por una parte, en el ámbito internacional, el Gobierno español ratificó en junio de 2005 la Convención Internacional sobre la Protección del Patrimonio Cultural Subacuático, que resalta la importancia de dicho patrimonio como parte integrante del Patrimonio Cultural de la Humanidad. Por otra parte, y en el ámbito nacional, el desarrollo de las competencias en materia de arqueología por las Comunidades Autónomas, ha llevado a algunas de ellas a crear sus propios centros de arqueología subacuática. A su vez, en el propio Museo se ha producido un incremento de las colecciones desde su creación. En último lugar, el Plan Nacional de Protección del Patrimonio Arqueológico Subacuático, aprobado por el Consejo de Ministros de 30 de noviembre de 2007, traza las líneas básicas de protección de este patrimonio, haciendo especial mención al papel del Museo como centro de referencia en este ámbito.
La nueva Sede. Todas estas razones han llevado a la conveniencia de efectuar un cambio conceptual en la institución con objetivos, fines, organización y funciones diferentes de las actuales. Por otro lado, hay que destacar que este Museo renovado ocupa en la ciudad de Cartagena un nuevo edificio construido por el Ministerio de Cultura con una inversión total de18.675.537 de euros. La exposición permanente (1.600 metros cuadrados) que se inaugurará próximamente transmitirá un mensaje inequívoco de la nueva misión de esta institución, de sus metas, sus objetivos, fines e historia.
ARQUA es el organismo del Ministerio de Cultura encargado de la colaboración en la gestión entre las distintas administraciones Autonómicas y sus centros de investigación, así como con la cooperación con los Estados Parte, firmantes de la Convención, en el estudio, valoración, investigación, conservación, difusión y protección del Patrimonio Cultural Subacuático Español.
ARQUA es un centro internacional, con competencias compartidas sobre el Patrimonio Cultural Subacuático Español en sus aguas interiores y archipielágicas, las del mar territorial y la plataforma continental, y como Estado Pabellón en las aguas internacionales, según la Convención.
ARQUA pretende ser:
– ARQUA: el Museo del Patrimonio Cultural Subacuático Español
– ARQUA: el Museo de la Arqueología Subacuática
– ARQUA: el Museo Mediterráneo de la Arqueología Subacuática
– ARQUA: el Museo de nuestro legado en mares y océanos
– ARQUA: el Museo de nuestra historia desde el mar
– ARQUA: el futuro de la Arqueología Subacuática de España
Sus funciones son
– ARQUA: protege el Patrimonio Cultural Subacuático Español
– ARQUA: conserva el Patrimonio Cultural Subacuático Español
– ARQUA: investiga el Patrimonio Cultural Subacuático Español
– ARQUA: documenta el Patrimonio Cultural Subacuático Español
– ARQUA: difunde el Patrimonio Cultural Subacuático Español
Museo Nacional de Arqueología Subacuática. ARQVA: Una arquitectura de vanguardia
El nuevo ARQVA Museo Nacional de Arqueología Subacuática de Cartagena ofrece, a través de su arquitectura de vanguardia, una imagen innovadora de la nueva Institución. La arquitectura del nuevo Museo se constituye en un emblema para el Centro, al que dota de una sede apropiada para desarrollar las competencias y funciones acordes a su actual misión.
El edificio, además, supone una aportación fundamental para la ciudad de Cartagena, a la que se incorpora como equipamiento cultural de primer orden. La construcción del Museo sobre la zona del puerto, espacio urbano privilegiado, supone establecerse sobre la propia memoria de la ciudad, debido a su extraordinaria relación con el mar.
La idea del mar impregna el lenguaje arquitectónico del edificio, que conjuga los conceptos de lo subterráneo, lo sumergido, la vinculación a lo acuático y a la ciudad.
Historia de un proyecto. En 1995 la Autoridad Portuaria de Cartagena, dentro de un ambicioso proyecto de recuperación urbanística, ofreció al Estado los terrenos situados en el muelle comercial de Alfonso XII donde se ha levantado la nueva sede del Museo, siguiendo el proyecto del arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra (Premio Nacional de Arquitectura, 2005).
La construcción del edificio, cuya primera piedra se puso en el año 2002, ha sido ejecuta por la empresa FCC Construcción, S.A., adjudicataria del concurso convocado a tal fin por el Ministerio de Cultura. Finalmente, tras sufrir varios retrasos, el pasado 12 de noviembre de 2007 fue firmada el acta de recepción del edificio.
El proyecto del Museo, de gran calidad arquitectónica, fue seleccionado recientemente para ser expuesto en Nueva York, dentro de la exposición On-site: nueva arquitectura española dedicada a los proyectos arquitectónicos contemporáneos españoles, exhibida a lo largo del 2006 en el MOMA de Nueva York y, posteriormente, en el Real Jardín Botánico de Madrid.
Diseño. El edificio emerge a superficie con dos volúmenes, disponiendo entre ellos una plaza, desde la que una amplia rampa desciende conduciendo al visitante al interior del Museo. La forma arquitectónica se centra en el concepto de lo subacuático, y tiene por objetivo que el visitante penetre en las profundidades para acceder al patrimonio sumergido que es objeto de su exposición.
El edificio se concibe a partir de dos volúmenes enfrentados: el primero, de forma prismática y opaco al exterior, se dispone en paralelo al muelle; el segundo, a modo de lucernario para el Museo excavado, irregular en planta y con mayor transparencia, se enfrenta a aquel, conformando entre ambos un espacio abierto a modo de plaza que sirve de vestíbulo del edificio y antesala del Museo.
El edificio
-La relación con el entorno de la ciudad de Cartagena y su vinculación con el mar. El edificio representa la aproximación al mar por parte de la ciudad a través de una serie de intervenciones en el Muelle de Alfonso XII, reservado hasta hace sólo unos años a instalaciones y faenas portuarias. El cantil del Muelle Alfonso XII, construido por delante de las murallas de Carlos III, es desde 1872 el nuevo borde físico de la ciudad. En su lugar nuevos edificios, como ARQUA o el Auditorio de Cartagena generarán un importante foco de actividad que revitalizarán al mismo tiempo la bahía y la ciudad.
– La relación del edificio con el mundo subacuático. La arquitectura del Museo es coherente con el lugar y las características propias de su entorno. Fuera de este contexto perdería su significado y su razón de ser. El Museo se ubica en un terreno de relleno, un espacio donde antes estuvo el mar. El visitante se adentra penetrando en el interior de la tierra, en referencia al mundo subacuático, procedencia del patrimonio cultural sumergido. Los materiales expuestos vuelven así a su lugar de procedencia, ahora bajo la capa de granito del viejo muelle portuario.
Materiales
El edificio aporta una riqueza de materiales en consonancia con la forma arquitectónica, el diseño y los valores contemporáneos del proyecto. El empleo de hormigón tintado en los alzados, el uso del basalto chino en los pavimentos, así como el acero y el cristal, proporcionan la imagen de un edificio en la vanguardia de la arquitectura de museos actual.
El nuevo Museo dispone de unos 6.000 m2 de superficie de los que alrededor del 35% se destina a exhibición de colecciones, al disponer de una sala de Exposición Permanente de 1.600 m2, y de una extraordinaria sala de 500 m2 destinada a albergar el futuro y dinámico programa de Exposiciones Temporales del Centro.
A estos grandes espacios hay que añadir los casi 1.000 m2 destinados a la conservación de los ricos y variados fondos que atesora el Centro, dotado de un gran anforario, de una excepcional sala de compactos y de un almacén visitable en donde se exhibirán las colecciones que no tienen espacio en la Exposición Permanente, ordenadas por pecios o yacimientos.
El Área de Conservación dispondrá de instalaciones adecuadas para albergar los distintos archivos documentales, ya sean fotográficos o planimétricos, que junto con su moderna biblioteca, proyectada a dos alturas y disponiendo de iluminación natural indirecta, facilitarán la tarea de los investigadores y de todos aquellos ciudadanos interesados por conocer nuestro patrimonio subacuático.
El Museo tendrá, además, una relevante área destinada al Departamento de Difusión con aulas preparadas para desarrollar los diversos talleres y actividades previstas. En esta línea de formación y de necesaria divulgación científica, el Museo dispondrá de un Salón de Actos, dotado de los últimos avances tecnológicos que lo convierten en un espacio polivalente para celebrar actos de todo tipo.
Del mismo modo el Museo cuenta con espacios destinados a albergar servicios tales como cafetería, tienda, y otras instalaciones pensadas para que el Museo no sólo sea un lugar de exhibición sino también de encuentro cultural para la ciudad de Cartagena.
Imagen: Museo Nacional de Arqueología Subacuática