La exposición ‘10 Razones para la Humanidad. 10 cuevas con arte paleolítico en Cantabria’ ha sido presentada en la Feria del Libro. La muestra se exhibirá en los Jardines del Buen Retiro hasta el próximo 28 de junio. Cantabria es la Comunidad Autónoma invitada en la actual edición de la feria. El acto celebrado en el Pabellón Carmen Martín Gaite ha contado con la presencia de el presidente del parlamento cántabro, Miguel Ángel Palacio, y el consejero de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria, Francisco Javier López Marcano.

El arte rupestre paleolítico es una de las manifestaciones culturales más relevantes de la historia de la Humanidad. Sin olvidar sus cualidades estéticas, desde un punto de vista histórico la importancia de este ciclo artístico deriva de su carácter representativo de una etapa crucial en la evolución humana: la aparición del Homo Sapiens. En esas cuevas se hace realidad la teoría del eterno retorno, “allí nace el arte occidental y a ellas vuelven muchos creadores”, ha señalado López Marcano, quien ha subrayado que el hecho cultural “notable” de este año es la declaración de Patrimonio Artístico de la Humanidad por parte de la UNESCO de 17 cuevas del litoral cantábrico, “parte importante de la escuela franco-cantábrica”, de als que nueve de ellas pertenecen a la comunidad de Cantabria.

A través de 65 espectaculares fotografías, la muestra propone a sus visitantes un interesante recorrido por las diferentes cuevas de Cantabria, de la que la más conocida es la de Altamira. De proporciones modestas y formas sencillas, con techos planos y paredes escalonadas en cornisas que constituyen soportes óptimos para el arte paleolítico, en esta caverna Marcelino Sanz de Sautuola descubrió en 1879 el techo más famoso del arte rupestre mundial. En él se compendian todas las técnicas de ejecución de la pintura y el grabado paleolíticos, alcanzando en su combinación un grado de maestría y una expresividad verdaderamente sin par. El seguimiento del itinerario se acompaña de textos explicativos que invitan a conocer el arte rupestre paleolítico y la importancia del patrimonio humano presente en las esplendorosas cuevas de Cantabria. La muestra irá acompañada de un catálogo bilingüe (español/inglés), de 80 páginas encuadernadas en rústica con 60 fotografías.

Francia, Al-Andalus y el Magreb

Con una presentación sobre las investigaciones francesas sobre Al-Andalus y el Magreb, la Casa de Velázquez ha celebrado en el Pabellón Fundación Círculo de Lectores la primera de las mesas redondas dedicadas a la colaboración científico-cultural  entre España y Francia. Pierre Guichard, de la Universidad Lumière Lyon 2, y Eduardo Manzano, director del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC han repasado la tradición investigadora sobre la historia y posterior influencia de Al-Andalus y del Magreb de uno y otro lado de los Pirineos. Pierre Guichard (Toulose, 1939) es uno de los medievalistas de referencia en los estudios de Al-Andalus. Profesor de la Universidad de Lyon, entre sus títulos publicados en España destacan Al-Andalus, estructura antropológica de una sociedad islámica en Occidente, donde por primera vez se consideraba a Al-Andalus como una sociedad con su propia especificidad. Eduardo Manzano Moreno, doctor en Historia por la Universidad Complutense, es investigador científico del Instituto de Historia del CSIC. Ha publicado gran número de trabajos sobre al-Andalus tanto fuera como dentro de nuestro país, y entre sus libros destacan La frontera de al-Andalus en época de los Omeyas (1991) o Historia de las sociedades musulmanas en la Edad Media (1992).

Fundada en 1920 y, tras la Guerra Civil, reconstruida en 1959 en su emplazamiento original, en plena Ciudad Universitaria, la Casa de Velázquez es hoy en día un establecimiento público con carácter científico, cultural y profesional. Tiene como misión el desarrollar las actividades creadoras y las investigaciones relativas a las artes, las lenguas, las literaturas y a las civilizaciones de España y del mundo ibérico, el contribuir a la formación de artistas y de profesores-investigadores, y el participar en el desarrollo de los intercambios artísticos y científicos entre Francia  y los países ibéricos.