Hace más de 25 años la fundación La Caixa decidió apostar fuerte por Barceló incluyéndolo en la exposición “26 pintores, 13 críticos, panorama de la joven pintura española” celebrada en 1982 y en la que el mallorquín tuvo un éxito muy destacado. Tras este primer encuentro La Caixa ha seguido de cerca la evolución del artista incorporando algunas de sus obras claves a la colección de arte contemporáneo de la Fundación y celebrando, hace apenas un año, la muestra “El mar de Barceló” en la que se mostraba el proceso creativo de Barceló en la realización de la cúpula de la sede de las Naciones Unidas en Ginebra y ahora con “Miquel Barceló 1983-2009, La solitude organisative” La Caixa consolida la firme apuesta que hizo por el artista en los años 80.
La implicación personal de Barceló con la exposición ha permitido que el visitante sea recibido por una espectacular escultura situada en el exterior de CaixaForum, cedida para la ocasión por el propio Barceló. Se trata de “Gran elefante dret”, un inmenso elefante de siete metros de altura realizado en bronce y perteneciente a los últimos trabajos del artista centrados en la representación de mamíferos corpulentos con los que suplanta su propia personalidad.
Tras esta primera introducción al “Universo Barceló”, la muestra propone una segunda área bajo el nombre de “Un repertorio de la esperanza humana” y en ella se podrán ver las acuarelas –algunas por primera vez- que realizó a finales de los noventa para ilustrar una edición de la Divina Comedia de Dante.
“Huir del exceso” es el cuarto bloque temático de la muestra y esta compuesto por varios lienzos de gran formato en los que Barceló, inspirado por un viaje que realizo al Sahara en 1989 , comienza a basar su pintura en agujeros y luz utilizando una gama pálida y monocromática a la que complementa con diminutas sombras con las que pretende “desintoxicarse del exceso de Occidente”.
“Chemin de Lumiere”, la quinta parada de la exposición, recoge la especial relación de Barceló con la oscuridad y la noche, puesto que trabaja habitualmente de noche, en un sala con un montaje escénico impactante en el que se muestran distintas obras realizadas o concebidas en la penumbra, a la luz de la luna o con lámparas de aceite y en las que Barceló parece plasmar la luz que se vislumbra en la profunda oscuridad.
Por último, la muestra termina con “Retratos”, una temática bastante minoritaria en el arte contemporáneo pero que Barceló también trabaja con un estilo que recuerda a los grandes vanguardistas de la primera mitad del siglo XX como Kokoschka. En esta área el visitante podrá observar como el artista retrata a personas queridas y admiradas por él como la historiadora del arte Dore Ashton o sus amigos africanos de Mali y el lienzo que da nombre a la muestra “La solitude organisative”, un autorretrato en el que Barceló se representa como un gorila de aspecto serio sentado en un rincón, una metáfora sobre su aislamiento artístico interior.
Marta de Orbe
“Miquel Barceló 1983-2009, La solitude organisative”
CaixaForum Madrid
Del 10 de febrero al 13 de Junio
Entrada gratuita.
El libro, editado por el Museo Reina Sofía, es el catálogo que acompañó a la…
«En el aire conmovido…» es una exposición concebida por el filósofo e historiador del arte,…
"Árboles" es un exquisito libro que, a modo de arboreto de papel, nos presenta una…
El Museo Nacional del Prado ha recibido en depósito dos lienzos cuatrocentistas dedicados a la…
Dos libros de bolsillo sobre Wassily Kandinsky "Los años de Múnich" y "Forma, composición y…
El artista Pedro Torres, nacido en Brasil (Gloria de Dourados, Mato Grosso, 1982) y afincado…