La Fundación MAPFRE ha inaugurado, en su sala de exposiciones AZCA, la exposición de la fotógrafa catalana Anna Malagrida, la primera muestra que la Fundación MAPFRE dedica a un fotógrafo español y a su vez el primer gran proyecto institucional que Malagrida realiza en España.
Afincada en Paris desde 2004, Anna Malagrida es una de las fotógrafas españolas más interesantes del panorama actual. Su obra, llena de poética, presenta una contraposición constante de conceptos antagónicos; interior y exterior, luz y oscuridad, transparencia y opacidad, realidad y representación, unos conceptos que quedan claramente plasmado en cada una de sus fotografías gracias a la utilización de uno de los recursos más manidos de la historia del arte, la ventana, una ventana que a veces es simplemente un vidrio transparente que se suma al cristal de su objetivo y no interfiere en la imagen y otras adquiere un peso fundamental en la composición y da un carácter claramente pictórico a sus fotografías.
Aunque también trabaja el video, como ella misma ha señalado, “Las fotografías son mi medio esencial de expresión, con ellas profundizo en la esencia de la fotografía y me permite expresar ideas que no podría plasmar a través de otras disciplinas”, de hecho sus videos no son concebidos como videos en si mismos sino como fotografías en las que se puede alargar el momento representado.
La muestra que ahora acoge la Fundación MAPFRE no se ha planteado como una retrospectiva cronológica de toda su obra sino, como ha explicado la comisaría Isabel Tejeda “El discurso expositivo se ha planteado a partir de uno de los elementos más representativos de la obra de Anna, la ventana”, por ello la exposición no incluye todos sus trabajos que sin embrago si han sido reflejados en el catálogo.
De este modo la muestra presenta algunas de sus series más conocidas como “Vistas Veladas”, un conjunto de fotografías realizadas en la ciudad de Amman (Jordania) en las que el azar ha jugado un papel decisivo ya que, aunque la idea primigenia de Malagrida era realizar fotografías de la ciudad desde las alturas de los hoteles de lujo, planteando así una dicotomía entre la visión elevada de los poderosos y la realidad social de la ciudad, los sistemas de seguridad de los hoteles hicieron que las fotografías se velaran dando como resultado esta fantástica serie ”accidental” a la que la casualidad ha dotado de un significado aún mayor presentando unas fotografías veladas, como la misma sociedad jordana, escondidas bajo una extraña luminosidad de la que emergen sutilmente las vistas de la ciudad. La serie se completa como el video “Danza de mujer” grabado en el desierto jordano y en el que la artista plantea una vez más la idea de la ventana, el velo, lo visible y lo oculto.
En “Escaparates”, otra de sus series más interesantes, Malagrida capta con su objetivo algunos escaparates parisinos de comercios cerrados, unos escaparates tapados por brochazos de pinturas que tras pasar por el objetivo de la artistas se trasforman en fotografías tremendamente pictóricas muy cercanas a la estética del informalismo o del expresionismo abstracto americano, un resultado muy similar al que consigue en su serie “Point de Vue”, un trabajo inédito realizado específicamente para esta exposición en el que el polvo de las ventanas de un edificio abandonado vuelve a dotar de esa categoría pictórica al trabajo de Malagrida.
En definitiva más de treinta fotos y seis videos repartidos a lo largo de un recorrido expositivo en el que la ventana funciona como hilo conductor de cada una de las series fotográficas y como protagonista indiscutible del trabajo de Malagrida, un trabajo lleno de mensaje y tremendamente estético en el que la fotógrafa permite al espectador asomarse a una realidad veraz pero parcial acotada por los limites de una ventana que deja ver a través de ella parte de la imagen mientras sugiere lo que aun estando no se ve.
Marta de Orbe
Anna Malagrida
Fundación MAPFRE, sala de exposiciones AZCA
Del 21 de mayo al 1 de agosto.