El Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE), la Biblioteca Nacional de España, la Filmoteca Española (adscrita al Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales), los 18 museos y 9 archivos adquieren la condición de “agentes de ejecución”
Gracias a esta consideración podrán participar en proyectos de investigación financiados por los fondos estatales dedicados al fomento de la actividad científica
El Instituto de Patrimonio Cultural de España, la Biblioteca Nacional de España, la Filmoteca Española, y los archivos y museos de titularidad y gestión estatal, incluidos el Museo del Prado y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, adquieren la condición de “agentes de ejecución” de la nueva Ley de la Ciencia aprobada hoy en el Congreso de los Diputados, tal y como recoge la Disposición Adicional Decimocuarta
La Ley considera “agentes de ejecución” a las entidades que realicen o den soporte a la investigación científica y técnica (artículos 3.4, 41.1c y 45.1). Estos agentes podrán participar en proyectos de investigación financiados gracias a los fondos estatales dedicados al fomento de la actividad científica, y contratar personal investigador para ello. La Ley también les atribuye un papel fundamental en la “comunicación científica pública”, es decir, en la difusión del conocimiento científico, misión que sintoniza con la vocación social de las instituciones adscritas al Ministerio de Cultura.
De este modo, el Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE), la Biblioteca Nacional , la Filmoteca Española (adscrita al Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales), los 18 museos y 9 archivos del Ministerio de Cultura, además del resto de las instituciones similares adscritas a otros Ministerios, adquieren el reconocimiento oficial a una función que estaba en su propia razón de ser (según ya consagraba, por ejemplo, la definición de “museo” del Consejo Internacional de Museos) y que han venido realizando por vocación y servicio, pero sin respaldo oficial, desde hace décadas. Gracias a este impulso, podrán ahora aumentar su contribución, desde sus respectivos campos de actuación, al conocimiento científico en nuestro país y compartir ese conocimiento con toda la sociedad.