El Museo Guggenheim Bilbao acoge, del 14 de junio de 2011 al 8 de enero de 2012, Abstracción pictórica, 1949–1969: Selecciones de las Colecciones Guggenheim, una exposición que analiza las tendencias artísticas fundamentales del arte norteamericano y europeo, en un recorrido único por dos décadas de creación.
En total, la muestra reúne cerca de ochenta obras de más de sesenta artistas procedentes de las colecciones del Solomon R. Guggenheim Museum, la Peggy Guggenheim Collection y el Museo Guggenheim Bilbao, y explora las similitudes entre distintas manifestaciones artísticas surgidas en Europa y Norteamérica.
Desde que se inauguró en 1997, el Museo Guggenheim Bilbao ha contado con el arte de este período como punto de partida para la formación de su Colección Propia.
Dos décadas de obras de los principales artistas abstractos europeos y americanos que evidencia las sorprendentes afinidades entre creadores que trabajaron en continentes distintos en un período de transición y de grandes avances creativos.
Contexto sociopolítico
La exposición se completa con una serie de espacios didácticos diseñados con el objetivo de acercar al visitante una selección de hitos políticos, sociales, literarios, musicales y cinematográficos que tuvieron lugar en América y Europa, durante las décadas de los años cincuenta y sesenta. Música, textos, imágenes y audiovisuales de las incipientes televisiones públicas nos transportan a un pasado reciente al que nos asomamos desde esta “ventana abierta”. Además, una serie de informativos incluyen noticias sobre la revolución cubana, el alzamiento del muro de Berlín y la activa lucha de Martin Luther King en EE. UU., entre otros.
Durante la Guerra Fría surgieron numerosos enfoques estilísticos dentro de la abstracción pictórica. En respuesta al caos provocado por la Segunda Guerra Mundial y al auge de la filosofía existencialista, los artistas europeos recurrieron a la hibridación y a la síntesis, en contra de los valores utópicos y experimentales anteriores. El Arte Informal, o arte sin forma, abarca una gran variedad de prácticas abstractas y métodos pictóricos que emergieron en esa posguerra.
El arte como libertad política
Mientras tanto, la pintura en EE. UU. evolucionaba hacia un estilo muy expresivo basado en el gesto. Del mismo modo que los informalistas, los expresionistas abstractos se interesaron por el proceso y los fundamentos de la creación artística, así como por ahondar en el subconsciente o en los estados emocionales. Para los artistas de la España de Franco y del Este de Europa, donde la represión dominaba incluso los ámbitos de la estética, el arte fue un símbolo de liberación política.
Otros artistas europeos, como Lucio Fontana, Yves Klein y Piero Manzoni, exploraron numerosas aproximaciones que consideraron más científicas, objetivas e interactivas por naturaleza, y adoptaron las superficies monocromas puras. En movimientos tan dispares como el Grupo Zero y el Arte Óptico, los artistas captaron los sentidos de los espectadores y exploraron la desmaterialización, centrándose en transformaciones ópticas en lugar de en el objeto artístico.
Los primeros expresionistas abstractos trataban de combinar forma y emoción centrándose en la expresión de la realidad psíquica del artista y evitando elementos externos. Llamada a veces Pintura de Acción, los grandes lienzos de Jackson Pollock y otros creadores fusionan las cualidades afectivas heredadas del heroísmo subjetivo del Expresionismo y de la técnica surrealista de la escritura automática.
Abstracción pictórica, 1949-1969
Selecciones de las Colecciones Guggenheim
Del 14 de junio al 8 de enero de 2012
Museo Guggenheim de Bilbao
Comisarias: Tracey Bashkoff y Megan Fontanella