Una de las propuestas más interesantes de ARCO, que además se estrena en esta edición, es el programa Solo Objets. Esta iniciativa, que no hay que confundir con Solo Projects (también en la feria), abre algunos de los espacios del certamen a piezas de gran formato de artistas de diferentes países y galerías.

Obras a medio camino entre la escultura y la instalación que sorprenden al visitante que pasea entre los stands. “Es una manera de darle carácter de exposición a la feria y acercarla al concepto de bienal”, nos dicen desde la organización de ARCO. La idea es que el espectador disfrute de piezas llamativas y más espectaculares de las que se puede encontrar en los espacios de las galerías y pueda acercarse de otra manera a la trayectoria de los artistas que las han creado. “Además, estas obras están a la venta, claro”, nos recuerdan.

Exposición de esculturas
De momento, en la primera jornada, han gustado. Las personas que se han pasado por la feria se han interesado por las piezas, doce en total, y han preguntado por algunas de ellas. “La organización del certamen cuenta con un grupo de personas formadas para explicar a los interesados qué significan las obras y cómo trabajan los artistas”, explica Sara, coordinadora de estos informadores, que han llamado mediadores. “Si están muy interesados en alguna pieza, nosotros les remitimos a la galería correspondiente”, añade.

Esta iniciativa, comisariada por Manuel Blanco, catedrático de composición arquitectónica en la Universidad Politécnica de Madrid pretende sacar las obras de los stands y construir diferentes espacios en los dos pabellones que ocupa la feria. “Son elementos que juegan con su escala y rompen la de su propio espacio expositivo”, afirma Blanco. “Apropiaciones del gran espacio de ARCO que flotan en él”, asegura.

Artistas y galerías
En el Pabellón 8 de IFEMA, se pueden ver cinco de las piezas, todas en un mismo espacio expositivo y todas ellas realizadas por artistas iberoamericanos. Tomás Saraceno (argentino y de la galería Andersen’s Contemporary) presenta Iridescent Planet XL, Magdalena Fernández (venezolana y representada por la galería Henrique Faria Fine Art) presenta 1em005 Cuadrado móvil, Adriano Amaral (brasileño y de Transversal) propone un ladrillo de hormigón de papel japonés, Isaque Pinheiro (portugués y representado por Ybakatu Espaço de Arte) presenta Em cima da Terra e debaixo do Céu. Por último, Marlon de Azambuja (brasileño representado por Max Estrella), propone Cuestión Nacional.

En el Pabellón 10 se encuentran las demás obras. Seis de ellas volvemos a encontrarlas agrupadas en torno a una plaza de la feria: Marrakech’s Soul, de Jaume Plensa (español y de Lelong), Body Verus Twizy y Twizy Custom, de Jean-Luc Mouléne (francés representado por Chantal Crousel), Calumet, de Marius Engh, Titiled, de Isidro Blasco (representado por Fúcares), Cartas al cielo, de Alicia Framis y Trabalhos para nada “Sem Qualidades”, de Vasco Araújo. Por último, en el espacio OPENING, también en el Pabellón 10, se puede ver la obra Exedra Levelling Field, del artista turco Can Altay.

Irene G. Vara

1 COMENTARIO

  1. Cada año la decadencia es más profunda. Llegará el día en que alcance el fondo y muera el cuerpo del arte expuesto incapaz por remontar el abismo recorrido. La putrefacción emanará hedor. El concepto de arte en una galería debería ser revisado en profundidad. ¿Saben ustedes que en el mundo cultural ARCO es objeto dmofa galopante?

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