El Museo del Prado mostrará las obras de los últimos veinte años del artista
Una muestra que reunirá un conjunto de obras tardías de Murillo, fruto de su relación con don Justino de Neve, canónigo de la Catedral de Sevilla e importante mecenas y amigo personal del artista, y que constituirá una significativa contribución a la investigación sobre el pintor.
La exposición está organizada por el Museo del Prado, la Fundación Focus-Abengoa y la Dulwich Picture Gallery de Londres y comisariada por Gabriele Finaldi, director Adjunto de Conservación e Investigación del Museo del Prado, la exposición se inaugurará el 26 de junio en el Prado, para mostrarse después en el Hospital de los Venerables de Sevilla, concluyendo el año próximo con su presentación en el museo londinense.
Desde la gran exposición sobre Murillo celebrada en Londres y Madrid en 1982, han tenido lugar varias muestras dedicadas a aspectos específicos de la producción del pintor como las consagradas a los ‘murillos’ del Museo del Prado adquiridos por la reina Isabel Farnesio (Sevilla, 1996); su pintura de niños (Munich, Dulwich y Madrid, 2001) y sus obras en colecciones americanas (Fort Worth, 2002).
Recientemente se ha celebrado una importante exposición sobre la producción juvenil del artista en Sevilla y en Bilbao (2009-2010). La muestra que se presentará en el Prado el próximo 26 de junio se centra en el creativo dinamismo de la relación entre Murillo y Justino de Neve que generó un conjunto de pinturas de extraordinaria belleza y calidad, todas de las últimas dos décadas de actividad del artista.
Compuesta por una veintena de pinturas, grandes encargos y retratos, así como alegorías y pinturas de devoción, la muestra “Murillo y Justino de Neve. El arte de la amistad” se presentará en el Museo del Prado del 26 de junio al 30 de septiembre; en el Hospital de los Venerables de Sevilla, institución creada en la década de 1670 bajo la dirección de Justino de Neve y actual sede de la Fundación Focus-Abengoa, de octubre de 2012 a enero de 2013; y, como sede final, en la Dulwich Picture Gallery de Londres de febrero a mayo del próximo año.
Justino de Neve (1625-1685) se revelará en esta muestra como mecenas de algunas de las obras más destacadas y originales del pintor sevillano, como los grandes lunetos de la Fundación de Santa María la Mayor, que lucirán tras su restauración y limpieza, y la Inmaculada de los Venerables (también conocida como la Inmaculada “Soult”) del Museo del Prado, que se exhibirá con su marco original que se encuentra todavía en uno de los altares de la iglesia del Hospital de los Venerables Sacerdotes; las alegorías de La primavera y El verano (Hombre joven con una cesta de frutas), de la Dulwich Picture Gallery y la National Gallery of Scotland, respectivamente; y unas refinadísimas pinturas de temática religiosa sobre obsidiana procedentes del Museo del Louvre y el Houston Museum of Fine Arts (Rienzi).
La exposición estará organizada en varios apartados: el Autorretrato del pintor se muestra junto con el retrato de 1665 de su amigo y mecenas (ambos de la National Gallery de Londres); luego se reúnen las obras concebidas para la iglesia de Santa María la Blanca de Sevilla (Prado, Louvre y Faringdon Trust, Buscot Park, Oxfordshire); las obras hechas para la Catedral y el Hospital de los Venerables Sacerdotes (el gran Bautismo de Cristo de la Capilla de San Antonio, y la Virgen y el Niño distribuyendo pan a los saerdotes hoy en el Museo de Budapest) y las pinturas realizadas para la colección personal de Justino de Neve, entre ellas las tres pequeñas obras devocionales realizadas sobre obsidiana mexicana que se juntan por primera vez desde el siglo XVII, y una miniatura sobre cobre, recientemente identificada como obra del maestro sevillano. Cinco obras han sido restauradas en el Prado para esta exposición: tres propias, una de la Catedral de Sevilla y otra del Faringdon Trust.
El arte de la amistad
Justino de Neve, nacido en Sevilla de familia flamenca, fue ordenado presbítero en 1646 y fue nombrado canónigo de la Catedral de Sevilla en 1658. Hombre culto y enérgico, su amistad con Murillo desde por lo menos el principio de la década de los sesenta fue clave para que el artista obtuviese alguna de sus comisiones más importantes: la decoración de la iglesia de Santa María la Blanca (1664-1665), la decoración de la Sala Capitular de la Catedral (1667-68) y el remate del retablo de San Antonio (con el Bautismo de Cristo) en la capilla del santo (1667-68). Además, Justino de Neve encargó al pintor varias obras para su fundación para presbíteros jubilados, el Hospital de los Venerables Sacerdotes, y tuvo en su propia colección algunas de las obras más excepcionales del artista. Murillo pintó su retrato en 1665 (National Gallery, Londres) – presente en la exposición- como prueba de su amistad, añadiendo la inscripción “obsequium desiderio pingebat” (pintado con el deseo de regalarlo), y le nombró ejecutor de su testamento en 1682.
Catálogo
El catálogo que acompañará la exposición incluirá seis ensayos cuyos autores son: Gabriele Finaldi, Javier Portús, Peter Cherry, Teodoro Falcón, Benito Navarrete e Ignacio Cano. Constará también de las fichas correspondientes a las obras expuestas (Gabriele Finaldi, Elena Cenalmor y Xavier Bray) y un apéndice documental sobre la vida, familia y actividad de Justino de Neve.
Datos de interés:
Museo del Prado, 26 de junio – 30 de septiembre de 2012
Hospital de los Venerables de Sevilla, 11 de octubre de 2012 – 20 de enero de 2013
Dulwich Picture Gallery de Londres, 6 de febrero – 12 de mayo de 2013
Imágenes:
3. Jesús Niño repartiendo pan a los sacerdotes
Bartolomé Esteban Murillo
Óleo sobre tela, 219 x 182 cm
1678 – 1679
Budapest. Museo de Bellas Artes. Szépmüvészeti Múzeum
2. El Bautismo de Cristo
Bartolomé Esteban Murillo
Óleo sobre tela, 283 x 210 cm
1668
Sevilla, Catedral Catedral de Sevilla