El IVAM presenta una exposición de Francisco Solana que reúne 20 obras recientes que el artista ha realizado entre Miami y Cartagena durante los últimos dos años. Su pintura, heredera de la tradición hiperrealista de la pintura norteamericana de finales de los años 60 del siglo pasado, entronca con la estética del arte Pop y de sus habituales escenarios cotidianos.
Esta propuesta artística de Solana (Madrid 1969), nos invita a realizar una travesía por diversas ciudades contemporáneas de Estados Unidos. Un viaje circular a través de un paisaje urbano y humano que nos sitúa en la estética simbólica de la metrópoli moderna.
Francisco Solana, compone en primer plano escenas que buscan reflejar fundamentalmente el símbolo y el icono de una sociedad que se caracteriza por la trascendencia del culto a la imagen. Esta secuencia de representaciones cotidianas que nos ofrece, refleja la iconografía de una cultura de masas que, especialmente, Estados Unidos ha popularizado y extendido universalmente.
Relación con el cine y la publicidad
Esta fijación urbanita y social lleva al artista a proyectar unos lienzos que encuentran un destacado paralelismo en la construcción de formatos visuales como la fotografía, el cine o la publicidad. Ese lenguaje cercano a los medios de comunicación se traduce en unos códigos propios y en una unidad narrativa de planos cortos que entregan al espectador significados que se corresponde con una distancia íntima, ya que sirve para mostrar confidencia respecto al hecho mostrado.
Este artista viajero, comprometido, atento a la vida urbana y a las manifestaciones de la sociedad norteamericana, se apropia de una escenografía y una teatralidad de los espacios sociales en la que la aparición del hombre viene acompañada de soledad e incomunicación, típica por otra parte, de la cultura del ocio y el consumo que nos presenta Francisco Solana. En todas ellas cohabitan signos de languidez y falta de interés por practicar relaciones humanas. Son figuras lejanas a pesar de que algunas están próximas entre ellas. Sin embargo, las separa una distancia sensorial palpable que podemos comprobar en lienzos como Hombre derecha-hombre izquierda. Por otra parte, la obra Hopper in Key West es una escena silenciosa que pone de manifiesto la naturaleza apesadumbrada del ser humano contemporáneo y su dramática incapacidad de socializarse haciendo valer su suprema individualidad.
Por Art
Las obras de Solana se identifican con la captación del instante y de los fragmentos con que se teje la realidad y en ellas destaca un detalle íntimo de la vida cotidiana, que de otra forma pasaría desapercibido. En este sentido, los objetos y personajes generados con una gama cromática de colores claros, dominada por un rojo que inspira limpieza y frescura son una llamada a la calidez de lo doméstico que, de un modo decisivo, demuestran una inquietud por parte del artista hacia el pop art.
Francisco Solana, mediante esta técnica, congela momentos de la realidad perpetuando una mirada fija y continua sobre las cosas a través de un juego de luces de gran realismo que nos recuerda a Hopper. Bajo esta influencia, consigue rozar un hiperrealismo por medio de una composición geométrica del lienzo, a través de un sofisticado juego de luces y de una síntesis de los detalles que se encuentran próximos al lenguaje cinematográfico.
Así pues, la arquitectura es un elemento fundamental en la obra de Solana ya que desde diferentes ángulos descifra lugares comunes tomando como referente la expresión de los edificios que comparten actividad con manifestaciones de la vida cotidiana. De esta manera y desde escenarios intimistas y próximos, plantea un diálogo con el entorno que fortalece la identidad cultural del lugar e integra a los habitantes en una sensibilidad estética minimalista pos su visión parcial y detallista de los encuadres. El resultado es una visión urbana esquemática en la que se ponen en juego las virtudes y los defectos de nuestra cultura-sociedad.
EXIT. Francisco Solana
Del 10 de julio al 2 de septiembre
Instituto Valencia de Arte Moderno (IVAM)
Lunes y martes, de 10.00 a 17.00 horas
De miércoles a domingo, de 10.00 a 20.00 horas