Hasta el 5 de diciembre se podrá visitar la exposición “Fondo Marino y Humano” de David Paquet (Toulouse, 1964) en la Galería de Arte Amador de los Ríos. La muestra, comisariada por Maite Aguirre, está compuesta por 25 pinturas del artista.
Bajo el título “Fondo Marino y Humano”, la exposición tiene una puesta en escena totalmente superrealista. En la planta superior de la galería se encuentran los cuadros de temática marina, convirtiendo la sala en un acuario, mientras que los que tienen por motivo al hombre están en la planta de abajo.
El mundo de David Paquet, pintor autodidacta, ha sido y es eminentemente plástico. Ya de niño, cuando apenas contaba con cinco o seis años, utilizaba el dibujo como forma de expresión, un medio, para él, mucho más fácil que el de la escritura. Burdeos supuso el punto de partida con el descubrimiento de la pintura acrílica a la que llegó gracias a una amiga. Ya lo había intentado con el óleo pero los líquidos le hacían reacción en los dedos.
A finales del año 1988 llega a Madrid. Aquella fue una época de plena creatividad ya que, al no hablar nada de español, empleaba todo su tiempo en pintar y dibujar. Gracias a un amigo pudo conocer de cerca la pintura de Costus. Su colorido, su forma de trabajar y la manera tan libre de expresarse le produjeron un impacto tal que fue para él una revelación. A partir de entonces Costus será una gran influencia.
Su técnica a la hora de trabajar es mediante la fotografía. Antes de enfrentarse a un cuadro, primero hace fotos del modelo que luego le servirán como bocetos. Para ello, cuida mucho la iluminación, sobre todo emplea luz blanca que le permite apreciar en su totalidad el objeto o la persona, y así tener un punto de referencia muy preciso.
Son fotos diáfanas, estructurales, en el sentido más literal de la palabra, donde lo que se pretende es ver claramente cómo es el objeto o la anatomía del modelo.
Para conseguirlo es muy importante la relación con el modelo en el estudio, interactuando con la persona que va a ser retratada, hablando con ella y haciendo que se sienta a gusto, porque son momentos de gran complicidad, de un trato muy cercano. Estas claves se las dio su gran amigo, el fotógrafo Pablo Pérez-Mínguez, Premio Nacional de Fotografía del año 2006, con quien ha colaborado en muchas ocasiones.
Junto a él y Alexis Moreau, en 1997 fundan la Talismán Gallery, una galería de arte alternativo en la calle de la Reina, en Madrid, convirtiéndose en pionera del arte underground. Durante dos intensos años aquello fue un no parar de gente y de mucho salir, donde todo el mundo dentro del círculo artístico tenía cabida, como si de un Universo personal se tratase. Fruto de aquella intensa época, Paquet se refugiaría en sus cuadros y, concretamente, en las formas circulares como los mandalas, que tanta paz transmiten. Este tipo de pintura era para él una manera de curarse. Y es que, a pesar de las prisas, su faceta espiritual siempre ha primado frente a los asuntos más terrenales. Fue entonces cuando giró la mirada hacia su interior, ajustándose a la realidad del presente, utilizando la excelencia del sentido práctico. Sus mandalas evolucionaron y pasaron a ser naves o naos, convirtiéndose en “Mandalas Mecánicos”, pintados con pequeños trazos, con mucho detalle.
Con esta nueva colección titulada «FONDO MARINO Y HUMANO» nos propone y abre una nueva etapa en su pintura, basada en lo que él denomina SUPERREALISMO. Ha hecho de él su forma de vida y lo plasma en sus obras. Esta nueva manera de plantear su trabajo tiene que ver con una expansión de su conciencia a lo largo de estos últimos años, la importancia de vivir en el presente, no en el pasado ni en el futuro.
Datos de interés:
Galería de Arte Amador de los Ríos
C/ Fernando el Santo, 24 – 28010 Madrid.
Horario: L-V, 11h-14h – 17h-20h