Jaume Plensa, ESTAMPA 2013En esta nueva edición será Jaume Plensa, Premio Nacional de Arte Plásticas 2012 y Premio Nacional de Arte Gráfico 2013,  quién pondrá la imagen a la feria que se celebrará del 10 al 13 de octubre en Matadero Madrid. Desde 2005 se han sucedido en esta tarea artistas tan señalados como Chema Madoz,  Ana de Matos, Juan Moro, Jan Hendrix, Jesús Pastor, José Pedro Croft, Carlos Cruz-Diez y José Manuel Ballester en la pasada edición 2012.

Jaume Plensa (Barcelona, 1955) sorprende con sus obras esculturales en prácticamente todas las ferias y certámenes de arte, ha expuesto en galerías y museos de todo el mundo, ha realizado esculturas de gran formato en Estados Unidos, Europa y Japón. Algunas de sus obras se pueden ver en espacios públicos de ciudades como Houston, Dubai, Boston, París, Frankfurt, Liverpool, Göteborg, Tokio, Seúl, etc. Y en el Millenium Park de la ciudad de Chicago, donde se halla quizá su pieza más emblemática hasta el momento The Crown Fountain (La Fuente de la Corona).

Jaume Plensa, lleva acabo la realización de una idea del espacio escultórico tanto hacia los grandes proyectos de escultura pública como a la escenografía y vestuarios para producciones de ópera. Su proyecto traspasa la plástica para verse influenciado por distintas disciplinas artísticas como la música, el teatro y la poesía. Este carácter multidisciplinar se muestra en la pasión del artista por los libros de artista, los grabados y las ediciones de múltiples sobre papel, esculturas de formato pequeño y obras con sonido, cuya selección se mostrará en la feria en una exposición especial.

Su obra comienza a final de los setenta con unos intereses dirigidos hacia cuestiones relacionadas con el volumen, el espacio y la tensión, confrontando materiales tan opuestos como el hierro forjado y el poliéster. A partir de 1983, de cortar y plegar pasa a fundir metales, es decir, su interés se traslada de la composición y manipulación externa a la conformación interna de energías, potencias, apariciones y metamorfosis, tomando su obra una deriva más telúrica, con tendencia a lo misterioso:

Plensa en Casa del Lector.- LOGOPRESS“Mi obra también ha tratado de conciliar los opuestos. Tal vez sea dentro de esa fricción de dualidades en donde puedo plantear las grandes preguntas de una forma más adecuada y encontrar, en su propia imposibilidad, el camino de la emoción”, también dice Plensa: “El cuerpo, como la palabra, es un contenedor lleno de memoria. Su vibración lo expande y su autodestrucción lo purifica». En uno de sus poemas escribe: «Cada ser humano es un lugar. Cada mujer, hombre, niño, viejo es un espacio habitable en sí mismo que se desplaza y desarrolla; un lugar en tiempo, en geografía, en volumen y en color. Mi obra es su memoria. La fijación congelada de tantos y tantos cuerpos desarrollándose y desapareciendo en la fugacidad de la luz. Y mi obra es su volumen”.