La muestra está planteada en torno a las numerosas similitudes que existen entre los dos artistas: cualidades artísticas, técnicas empleadas, vivencias personales y por supuesto, la sordera. Una discapacidad que llevó a ambos creadores a configurar una personalidad íntimamente ligada a su estilo de creación artística.
El fundamento de esta exposición es doble: por una parte existe una vertiente social, que se desarrolla en torno a la concienciación sobre la discapacidad de la sordera, y por otro, un objetivo artístico representado por la excelencia de las obras que se exponen en este proyecto.
En la vertiente social y como se ha mencionado, ambos autores padecieron sordera y este aspecto marcó de forma decisiva su torrente creativo. Por ello, se ha querido adaptar la exposición a las personas que sufren esta deficiencia y que, en muchas ocasiones, ven limitadas sus experiencias culturales. En todos los museos es frecuente encontrar auriculares y guías de diferente idiomas pero, ¿cuántas veces has visto una exposición con explicaciones en lenguaje de signos? Por este motivo, esta exposición ofrecerá visitas guiadas con lenguajes de signos y en las salas habrá personal bilingüe para prestar especial atención a este colectivo.
En su faceta artística, el proyecto pretende homenajear la trayectoria de dos artistas ejemplares, haciendo un recorrido por algunas de las obras más singulares de ambos autores.
Aunque Francisco de Goya y Lorenzo Goñi están separados por casi dos siglos de distancia, existe entre ellos un buen número de vínculos. Estos dos autores cuentan con muchas similitudes, tanto personales como artísticas, y en torno a éstas se desarrolla toda la exposición.
Francisco de Goya y Lucientes (1746 – 1828) es uno de los grandes pintores españoles junto a Velázquez y Picasso. Conocido a nivel mundial, se le puede considerar el último de los grandes autores clásicos, el iniciador del Romanticismo e incluso el inspirador de las vanguardias.
Debido a una grave enfermedad, posiblemente debida a la inhalación de plomo típica de los pintores, Goya se queda sordo con 47 años. Su enfermedad fomentó el aislamiento social del creador y condicionó definitivamente el estilo de sus obras. Sin embargo, para ese entonces, Goya ya era un reputado artista de la Corte y profesor de la Academia de San Fernando, lo que le ayudó a sobrellevar las secuelas de su enfermedad en una época tan difícil para las personas discapacitadas.
Lorenzo Goñi Suárez (1911 – 1992) encuentra en la pintura un refugio para abstraerse del mundo mudo que le rodea. Pero en este caso, el artista padece una sordera desde una edad muy temprana. Con 4 años, Goñi enferma de sarampión y las complicaciones de la enfermedad de producen una sordera degenerativa que culmina en torno a su adolescencia.
El aislamiento provocado por su discapacidad se acentúa por una timidez que lo aleja de la vida social por lo que su padre decide matricularlo en diferentes cursos de pintura. Si bien Goñi nunca sobresalió en las clases y terminó abandonando el curso, nunca olvidó la pintura.
Finalmente, Goñi acabó ganándose la vida como ilustrador para diferentes publicaciones como el diario ABC o varios libros de Camilo José Cela, entre otros. En 1953 estudió Grabado, convirtiéndose en uno de los mejores grabadores de España. Lorenzo colaboró con la revista PROAS (Promoción y Asistencia a Sordos) y fue jurado en el Concurso Nacional de Pintura de Sordos.
Esta exposición, de indudable valor artístico, es un recorrido por los numerosos nexos en común entre los dos autores que, con una centuria larga entre ello, han convergido en el modo de crear universos paralelos, contar historias y abordar temas populares.
Estos nexos en común conforman los diferentes espacios de la muestra: la guerra, los multiversos y los encuentros. En estos tres apartados están recopiladas tanto sus experiencias vitales como sus mundos interiores o sus aficiones.
Las obras que se exponen han sido cedidas por la Real Academia de San Fernando (plachas y grabados de Goya), la Biblioteca Nacional de España (5 carteles de Goñi) y la casa de Lorenzo Goñi en Madrid (resto de las obras).
Real Academia de Bellas Artes de San Fernando
Goñi y Goya
Calcografía Nacional / 29 de noviembre de 2013 – 19 de enero de 2014