4 TMadrid acogerá entre el próximo 24 de junio y el 13 de octubre de este año la mayor retrospectiva realizada hasta la fecha sobre el artista británico Richard Hamilton. La exposición, organizada por el Reina Sofía, fue concebida específicamente para el Museo madrileño por el propio Hamilton, quien se implicó y trabajó de manera directa desde los primeros meses de 2010 cuando visitó la capital española.

La muestra que se verá en el Museo Reina Sofía incluye unas 270 obras creadas a lo largo de más de sesenta años (entre 1949 y 2011) y permite conocer, tanto la extraordinaria variedad de medios, técnicas y géneros que caracterizan la producción de Hamilton, como la relevancia, influencia y actualidad de su revolucionario trabajo. Ha sido comisariada por Vicente Todolí y Paul Schimmel.

Es el último proyecto en el que este pionero del Pop Art y profeta del posmodernismo participó directamente antes de su fallecimiento, en septiembre de 2011. Una parte importante de la muestra –unas 160 obras- podrá visitarse entre el 13 de febrero y el 26 de mayo en la Tate Modern de Londres.

La exposición está integrada por pinturas, grabados, dibujos, fotografías, impresiones informáticas, obras de diseño industrial y réplicas, piezas en las que el artista abordó géneros como la naturaleza muerta, el retrato, la representación figurativa, el paisaje, los interiores, la pintura histórica, la propaganda política, la iconografía religiosa y la apropiación de elementos de la cultura popular y de la historia del arte.

Otro aspecto importante que distingue esta retrospectiva son las cinco instalaciones de gran envergadura, recreaciones de las exposiciones que el artista británico más influyente del siglo XX organizó, diseñó o que contaron con su participación.

RS Illustrator-1 [Converted]Las instalaciones presentes son Lobby 1985-7; an Exhibit (Un objeto de exposición, 1957); This Is Tomorrow (Esto es el mañana, 1956); Man, Machine and Motion (Hombre, máquina y movimiento, 1955); y Growth and Form (Crecimiento y forma, 1951). Esta última puede contemplarse por primera vez desde que fuera creada hace ya 62 años. Tres de ellas podrán verse también en la Tate. Además de considerar que son antecedentes de los happenings de finales de los cincuenta y principios de los sesenta, estas instalaciones anticipan también el abandono de las jerarquías en los medios artísticos y una sensibilidad creativa internacional que surgiría en los años noventa y que dio lugar a la aparición de la noción de instalación artística en el arte contemporáneo.

La retrospectiva también incide en las importantes relaciones que mantuvo con el diseño, la pintura, la fotografía, la tecnología y la televisión así como las colaboraciones que estableció con otros artistas y de la que son ejemplo los retratos de si mismo que invitaba a realizar a otros artistas con una cámara Polaroid como Francis Bacon, Andy Warhol o Roy Lichtenstein.

Las fuentes en las que Hamilton se inspira son muy diversas, desde los dibujos mecánicos, a la cultura popular, pasando por la obra de maestros antiguos como Fra Angelico y Giorgione, o de artistas y autores modernos como Marcel Duchamp o James Joyce.

La pluralidad de su obra, heterogénea pero coherente a la vez, tendió un puente entre la era moderna y la posmoderna y le convirtió en una importante figura para la nueva generación de artistas influidos por el arte conceptual. De hecho, no sólo se reconoce internacionalmente a Hamilton como uno de los fundadores del Arte Pop sino también como precursor del apropiacionismo, la instalación y otras tendencias que han sido cultivadas posteriormente.

Para esta ocasión, el Museo Reina Sofía ha editado un catálogo que reproduce las obras expuestas, con textos de  Benjamin H. D. Buchloh, Hal Foster, Mark Godfrey Richard Hamilton, Alice Rawsthorn, Paul Schimmel, Fanny Singer y Victoria Walsh.

Una parte de la muestra se presenta  en la Tate Modern (Londres) el  próximo 11 de febrero, y a partir del 24 de junio se podrá ver en el Museo Reina Sofía (Madrid) la antológica completa