La principal novedad de estos datos pasa por la incorporación –por primera vez- de los indicadores básicos de inserción laboral de los estudiantes universitarios. Estos datos se han extraído de la muestra continua de vidas laborales. Así pues, se dispone de información de los estudiantes egresados en el curso 2006-2007 y su situación en términos de afiliación a la seguridad social en los años 2007 hasta el actual, así como la cohorte de egresados del curso 2010-2011.
Según estos datos, se pueden extraer varias conclusiones:
La educación universitaria disminuye el riesgo de paro, como indican los datos de la EPA: la tasa de paro ha pasado del 8,3% en 2007 al 25% en 2012 para toda la población. Sin embargo, para la población con educación superior, no doctor, el crecimiento ha sido menos explosivo, del 5,4% en 2007 a 15,2% en 2012.
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, las ramas de artes y humanidades y ciencias son las que presentan menores porcentajes de afiliación entre los recién titulados, por debajo de la media (40,1% y 47,9% respectivamente, para la cohorte del 2005-06). Sin embargo, con el paso de los años -tres y cinco años después de la graduación- la rama de ciencias mejora significativamente hasta situarse por encima de la media. Por otro lado, los egresados de ciencias sociales y jurídicas, que alcanzan unas tasas de afiliación por encima de la media cuando son recién titulados empeoran su posición relativa con el paso del tiempo hasta situarse cinco años después por debajo de la media. Por lo que se refiere a los titulados en ciencias de la salud, su situación también mejora con el paso de los años.
El porcentaje de asalariados que hay entre los afiliados a la seguridad social prácticamente permanece constante a lo largo de los años -alrededor del 92-94%-, siendo la presencia de autónomos muy minoritaria, entre el 6% y el 8%. Quedan de manifiesto las bajas tasas de autoempleo y emprendimiento de los universitarios españoles.
Tipo de trabajo que realizan los universitarios: un año después de haberse titulado, el 48,1% ocupan puestos cuyo requisito es ser titulado universitario; el 23,5% ocupan trabajos con nivel de especialidad medio; y el 28,4% tienen trabajos con bajo nivel de especialidad y de carácter manual. Esto es, de los recién titulados prácticamente la mitad ocupan un puesto de trabajo acorde a su nivel de formación. La situación mejora unos años después. En concreto, los datos de 2012 para la cohorte de 2005-06 indican que el 60,4% ocupan puestos en los que se requiere titulación universitaria y el 16,8% siguen ocupando trabajos poco especializados de carácter manual.
Base de cotización: el 49% de los recién titulados, al año siguiente de haberse graduado, tienen una base de cotización inferior a 1.500 euros, mientras que a los seis años en este tramo de cotización se encuentra el 25%.
Del total de asalariados afiliados a la seguridad social, de la cohorte de 2005-06, el 41% tienen contrato indefinido a tiempo completo un año después de haberse graduado. El ámbito donde hay un mayor volumen de contratos indefinido es en ciencias sociales, educación comercial y derecho y ciencias. Es en la rama de artes y humanidades donde se observa un menor número de contratos indefinidos a tiempo completo.
La situación a los cinco o seis años mejora relativamente: el porcentaje de contrato indefinido a tiempo completo se eleva 15 puntos porcentuales hasta el 56% y se reducen considerablemente los contratos temporales del 51,2% de los recién titulados al 35,7% de los más veteranos.
Movilidad: tres de cada cuatro universitarios trabajan en la mismo Comunidad Autónoma en la que se han titulado.
Por lo demás, la edición del Datos y Cifras del Sistema Universitario español de este curso nos deja los siguientes datos de interés:
Universidades: En el curso 2013-2014 hay un total de 82 universidades (impartiendo docencia 80), distribuidas en 236 campus las presenciales y 112 sedes las no presenciales y especiales. Este curso ha comenzado con 1.030 centros universitarios (escuelas y facultades), 2.998 departamentos y 481 institutos de investigación. En definitiva, de media, tenemos 19.000 estudiantes por universidad, 1.500 por centro y 520 por departamento.
Estudiantes de grado: En el curso 2012-2013, en las universidades españolas se matricularon 1.450.036 estudiantes de grado y 111.087 de máster. La tasa neta de escolarización universitaria entre 18 y 24 años continúa con su tendencia creciente y se sitúa en el 28,6% (en el curso 2008-09 era del 23,8%).
Se prevé que en el curso 2013-2014 los estudiantes de grado se sitúen en 1.438.115, lo que indicaría un ligero descenso del 0,8%, es decir prácticamente un mantenimiento en su número. Se prevé un mayor porcentaje de descenso en las universidades privadas (-2,3%) que en las públicas (-0,6%). Estos datos están directamente relacionados con la reducción de la población entre 18 y 24 años, que en el año 2014 disminuye un 3,2% respecto a 2013. De hecho, se prevé que la tasa neta de escolarización del curso 2013-2014 se sitúe en el 29,7%. La reducción del número de estudiantes no es nueva, ya que en los cursos previos a 2008-09 se venía produciendo una pérdida media anual de estudiantes universitarios del 1%.
Estudiantes de máster: En el curso 2012-2013, el número de estudiantes que realizan un máster oficial se ha situado en 111.087. Se está observando cierta estabilización en su número, que se situaría en el entorno de los 105.000-110.000 estudiantes. La previsión para el total del sistema en el curso 2013-14 se sitúa en 109.113 estudiantes.
Becas: En el curso 2012-2013 la convocatoria general la han disfrutado 263.682 estudiantes y su importe se ha elevado hasta 757,7M€, lo que supone 6.608 beneficiarios menos que el curso anterior, esto es un 2,5% menos. En la convocatoria de movilidad ha habido 33.101 beneficiarios frente a los 35.164 del curso anterior, esto es 2.063 estudiantes menos (-5,9%). La inversión realizada en esta convocatoria ha sido de 159,2M€.
Estos datos deben vincularse a la disminución de estudiantes universitarios que ya se produjo en el curso 2012-2013 (0,5% en grado y 4,1% en máster).
Cabe destacar el incremento de los créditos iniciales destinados a las becas y ayudas al estudio que se ha producido en el presupuesto del año 2014, donde esta partida se ha elevado hasta 1.411M€ (teniendo en cuenta tanto las becas universitarias como no universitarias). El importe previsto en el año 2013 fue de 1.161M€ en el año 2013. Esto supone que en el ejercicio presente se da un crecimiento en el presupuesto del 21,5%.
En el curso 2011-2012, el porcentaje de becarios respecto al número total de estudiantes de grado fue el 22,3%. Sin embargo, entre los estudiantes de nuevo ingreso, el porcentaje de becarios fue del 41,4%. Estos datos ponen de manifiesto una alta tasa de pérdida de la beca tras el primer año de universidad, concretamente, el 37,3%. Es decir, de todos los estudiantes que entran en el sistema con beca, uno de cada tres la pierde al año siguiente.
Tasa de abandono: Por primera vez en el Informe “Datos y cifras del sistema universitario español” se presenta este indicador.
La tasa de abandono del estudio en primer curso del total de estudiantes de grado es del 19% y la tasa de cambio también en primer curso es del 7,1%. La tasa de abandono en el primer curso de los becarios es del 13,5% y la tasa de cambio del 7%. Esta tasa está también claramente relacionada con la nota con la que acceden los estudiantes. Un 17,9% de los becarios que entran al sistema con una nota inferior al 5,5% lo abandonan en el primer curso, mientras que los que cambian de estudio son el 7,9%.
Precios públicos: En el curso 2013-2014 el crecimiento de los precios públicos de las enseñanzas universitarias se ha moderado.
En los estudios de grado, el crecimiento medio anual respecto al curso anterior ha sido de un 2,9%. Por ello, el precio medio, en primera matrícula, de todas las ramas y todas las comunidades se ha situado en 18,42 euros/crédito, de manera que -de media- un curso de grado de 60 créditos, sin repetición de matrícula, supondría 1.105 euros.
El precio medio de los másteres habilitantes prácticamente se ha mantenido constante respecto al curso anterior (26,89 euros/crédito), aunque el comportamiento por comunidad autónoma es muy diferente. El precio medio de los másteres no habilitantes ha sido de 40,11 euros/crédito, lo que supone una reducción del 7,8% respecto al curso anterior.
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