Las ciencias experimentales protagonizan la décima edición de los Talleres de Verano de la Biblioteca Nacional de España que comienza el 30 de junio. A lo largo del mes de julio niños de 5 a 12 años podrán disfrutar de un variado programa de actividades que, en esta edición, les acercará al mundo de la literatura, la música, el arte, la historia, la ciencia, la fotografía y las nuevas tecnologías. Además, conocerán el aprendizaje de los nuevos modelos de acceso al conocimiento y la diversidad de las colecciones de la BNE.
“A los niños les gustan las actividades más participativas, las que implican experimentos. No les atrae lo pasivo, prefieren implicarse en la actividad y además, están encantados con los temas relacionados con las nuevas tecnologías y el mundo digital como los blogs, etc.”, señala la jefa del Museo Gema Hernández Carralón.
Este verano los participantes conocerán la Sala Barbieri en la que se encuentran todo tipo de documentos relacionados con la música como las partituras, libros y folletos, revistas especializadas, grabaciones sonoras y videograbaciones, archivos de la palabra y archivos musicales de compositores, cantantes, libretistas, etc. Además, cada día estará dedicado a un personaje histórico. Desde Darwin, pasando por Mozart, los Hermanos Grimm y hasta llegar a Warhol, los niños podrán acercarse a las diferentes ciencias.
Los talleres tendrán lugar en distintas fechas. El primero será entre el 30 de junio y el 11 de julio, mientras el segundo dará comienzo el 14 de julio y finalizará el 25 de ese mismo mes. Durante esas dos quincenas los programas serán adaptados para dos grupos de niños, estando uno comprendido entre los pequeños de 5 a 7 años, y el otro entre los de 8 a 12 años.
Telediario BNE
Las jornadas del campamento comenzarán a las nueve de la mañana y finalizarán a las tres de la tarde. Concebido para un máximo de 120 niños (sesenta por quincena), las actividades serán recogidas por el telediario de la BNE, gracias al taller de radio y prensa que se ha diseñado para ello y que grabarán los propios participantes. Al final del programa se celebrará una fiesta final en la que los niños podrán enseñar a sus familias lo que han aprendido durante el taller.
La puesta en marcha de estos campamentos de verano comenzó en 2005, año en el que se cumplía el cuarto centenario de la publicación de El Quijote. Los propios trabajadores del museo intentaban organizar algo, puesto que en los meses de verano los padres continúan trabajando mientras los más pequeños están de vacaciones. En abril de ese mismo año el Museo de la BNE decidió tomar la iniciativa. Hernández Carralón recuerda que “la primera edición se celebró en el Patio Sur, bajo una carpa, puesto que las instalaciones del museo, donde a día de hoy se realizan las actividades, se encontraban en plena reforma.
Los niños no accedieron en ningún momento a la Biblioteca y surgió la pregunta: ¿dónde están los libros? Rápidamente nos dimos cuenta que era muy contraproducente programar sin fomentar a los lectores del futuro del patrimonio y del cariño hacia libro. Al siguiente verano comenzamos con una visita al Salón General de Lectura, muy temprano, antes de que llegaran los lectores. En los últimos años hemos conseguido que los niños puedan visitar El laboratorio de restauración y taller de encuadernación artística. No puedes estar fomentando el amor a los libros y a la Biblioteca sin mostrarlos de alguna forma”.
