El lunes, 26 de enero, se conmemora el Centenario de la creación de la Dirección General de Bellas Artes, autorizada por la Ley de Presupuestos de 26 de diciembre de 1914 y materializada por las Reales Órdenes de 26 de enero y 12 de febrero de 1915. Este hito posee un gran valor simbólico en el proceso de institucionalización de las responsabilidades públicas sobre la cultura.
Creada para fortalecer administrativamente la organización del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, fundado en 1900, la Dirección General de Bellas Artes asumió desde su origen la tramitación de los asuntos relativos a monumentos nacionales, museos, escuelas artísticas, pintura, conservatorios de música y demás entidades de índole artística. Ha sido, por tanto, la unidad administrativa en torno a la cual se ha estructurado históricamente la acción pública estatal española en materia de cultura.
Por medio de diversas actividades e iniciativas que se pondrán en marcha a lo largo de este año, la celebración del Centenario de la Dirección General de Bellas Artes va a constituir una ocasión para reflexionar sobre la evolución de la administración cultural española a lo largo del último siglo y el papel aglutinador de esta Dirección General, la perspectiva y los desafíos actuales de los cuerpos profesionales y colectivos especializados en torno a la gestión del Patrimonio cultural y la situación presente y retos futuros de la Administración cultural: modelos internacionales, descentralización, colaboración público-privada y mecenazgo.