El Rey Juan Carlos ha visitado por sorpresa Cáceres el pasado sábado acompañado de su hija la Infanta Elena y unos amigos y ha mostrado su apoyo a la Capital Española de la Gastronomía. Todo lo que pueda hacer por esta tierra lo hago declaró a los periodistas. Tras pasear por la parte antigua de la ciudad, Patrimonio de la Humanidad, don Juan Carlos y sus acompañantes comieron en el restaurante Atrio, del chef Toño Pérez, con dos estrellas Michelin y degustaron el menú elaborado especialmente para la Capitalidad.
«Me gusta mucho Cáceres, lo hemos pasado muy bien», dijo al salir del restaurante, según recoge El Periódico de Extremadura y otros medios regionales. Al monarca se le notaba tranquilo. Era la primera vez que visitaba la ciudad tras su abdicación en junio del pasado año, cuando cedió el trono a su hijo, el actual Rey Felipe VI. Preguntado sobre el motivo de su visita, el monarca confirmó que se debía al título gastronómico que acaba de recibir, que está orgulloso de difundir y divulgar.
La suya es la primera visita de la monarquía a la ciudad tras lograr el título gastronómico. Previsiblemente también lo hará el Rey Felipe VI, que fue invitado por la alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, a pasar por Cáceres para disfrutar de su gastronomía durante un encuentro mantenido en la Zarzuela con el grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad.
Felipe VI visitó también el stand de la Capitalidad durante la inauguración de Fitur en Madrid, feria en la que la localidad recibió el testigo de Vitoria (capital gastronómica en 2014) y donde la alcaldesa volvió a reencontrarse con el monarca.
D. Juan Carlos degustó en Atrio un aperitivo elaborado en exclusiva para la Capitalidad, que gira en torno al cerdo ibérico. En los platos aparece dibujada la silueta de un cochino en color rosa, pintada con una crema agridulce que se podía mojar con unas cortezas de cerdo ibérico colocadas en una rama.
El menú (con un precio en carta de 110€) que degustaron el monarca, su hija y sus dos amigos llevaba también un ravioli de zanahoria encurtida con hortiguilla; falsos guisantes con wasabi y cochino frito; bloody mary con tierra de tomate, helado de cebolla y berberechos; gamba marinada con crema agria y ensalada de brotes; huevo frito con caviar (un plato homenaje a Tomás Herranz, que regentó el restaurante El Cenador del Prado en Madrid en los años 80); cigala con pan de algas; lubina con alcachofa y puré de coliflor y almendra; y cabrito asado. No faltó el producto estrella del chef Toño Pérez, la Torta del Casar, servida a temperatura ambiente y en helado. Para terminar un tocinillo de cielo, helado de yogur, golosinas y buñuelos de crema.
Era la primera vez que el monarca almorzaba en el hotel Relais & Chateaux de Atrio. Ya lo había hecho en el antiguo establecimiento ubicado en la plaza de los Maestros. La visita no pasó inadvertida en la ciudad. Llamó primero la atención mientras él y la infanta Elena paseaban por la parte antigua. Luego en Atrio, se sentaron en una mesa del salón del restaurante, ubicada junto al resto de comensales. El restaurante tenía todas las mesas ocupadas.
La alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado, manifestó que la visita a Cáceres por sorpresa del rey emérito de España Juan Carlos I, supone «un espaldarazo a la Capitalidad». Nevado resaltó la buena relación que mantiene el equipo de gobierno con la Casa Real. Y recordó el encuentro que mantuvo con el Rey Felipe VI en Zarzuela, durante una reunión con el grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad.
«Le pedimos que viniera a Cáceres y él prometió que pasaría por el stand de la Capitalidad en Fitur. Ha cumplido sus promesas», agregó Nevado. Felipe VI conoció el proyecto que Cáceres tiene preparado de cara al título gastronómico durante la inauguración de la feria del turismo. Para Nevado las palabras de Juan Carlos son un orgullo: «El Rey ha apoyado siempre a Extremadura. Ayer por el sábado dio un gran ejemplo con este gesto sencillo pero tan importante para nuestra tierra. Este empujón sirve para demostrar que somos importantes para la marca España y que Extremadura tiene mucho que decir en el panorama nacional», agregó la alcaldesa.
La del rey emérito no será la única visita de relevancia que recibirá Cáceres, se espera que a lo largo del año pasen por la ciudad personalidades nacionales e internacionales. «A lo largo del año nos deparan muchas sorpresas. Esta es la primera, pero cada una de ellas va a significar un antes y un después para el nombre de nuestra ciudad. Nos lo merecíamos», comentó Nevado.