El Museo Parroquial de Tapices de Pastrana se inauguró el 16 de julio de 1950 en lo que fuera la Sacristía Mayor de la Colegiata de Nuestra Señora de la Asunción. Tras una profunda remodelación a cargo del Obispado de Sigüenza-Guadalajara y de la propia parroquia, fue nuevamente abierto al público el 10 de octubre de 2014 para acoger la serie de tapices gótico-flamencos de Alfonso V de Portugal, que narran las conquistas de Arcila y Tánger protagonizadas por el mencionado monarca en 1471.
Tan significativa colección de tapices, considerada una de las más importantes del mundo de finales del S. XV, fueron restaurados gracias a la Fundación Carlos de Amberes en la Real Manufactura de Wit, en la ciudad belga de Malinas. En el 2013 regresan a Pastrana, su casa desde el siglo XVII, tras un itinerario por destacadas pinacotecas de Europa y Estados Unidos, para ser expuestos de manera permanente en un espacio museístico propio.
El museo incluye otras dos salas en las que se exponen obras de pintura, escultura y orfebrería de diversa autoría y época, entre las que destacan obras de Juan de Borgoña, Juan Carreño de Miranda o Juan Bautista Maíno, pintor nacido en Pastrana. Así como tallas atribuidas a Francisco Salzillo, Alonso Cano y otras del siglo XVII de la Escuela Castellana.
Pastrana además es durante el 2015 Ciudad Teresiana. Aquí fundo la Santa de Ávila en 1569 dos conventos carmelitas, uno femenino y otro para varones. Con motivo del Año Jubilar el museo ha organizado la interesante exposición temporal “Huellas. Un Camino de cinco siglos”, sobre la vida y obra de Santa Teresa de Jesús. Integran la muestra objetos y documentos de Teresa, así como obras de arte del templo.
La colegiata es una de las piezas clave de la rica historia de Pastrana, que se integra en un entorno arquitectónico propio en el que las figuras de los Primeros Duques y Príncipes de Éboli imprimieron un carácter único a esta localidad, donde conviven espacios medievales y renacentistas, que se aúnan con la esencia de la arquitectura popular castellana, aportando a todas sus calles y plazas un encanto que nos cautiva y transporta a épocas pasadas.
La visita finaliza en el panteón de la Iglesia donde descansan los restos mortales de los Príncipes de Éboli y de los duques del Infantado, procedentes estos últimos de la cripta que los Mendoza construyeran en el Convento de San Francisco de Guadalajara a finales del Seiscientos.
Visitas al museo
El museo sólo se puede ver con visitas guiadas, con un mínimo de 5 personas. Se realizan cinco pases todos los días, de lunes a domingo, a las siguientes horas:
Mañanas: 10:30, 11:30 (los domingos se adelanta a las 11:00 h) y 13:15.
Tardes: 16:00 y 17:30.
La entrada tiene un precio de 5€, excepto para menores de 12 años que es gratuita.