La Biblioteca Nacional de España, a través de su web, pone a disposición la digitalización en alta calidad de los incunables españoles, primer paso de una serie dedicada a los impresos del siglo XV que conserva la Biblioteca. Para comenzar se ha elegido un conjunto, los incunables españoles, tan representativo de la producción impresa como poco controlado hasta el momento, con un buen número de ejemplares únicos.
La colección cuenta con más de 350 ejemplares de otras tantas ediciones, de una cincuentena de las cuales no se conocen más ejemplares en el mundo. Impresas en buena medida por alemanes llegados a la Península a instalar sus talleres (Meinardo Ungut y Estanislao Polono en Sevilla, Fadrique de Basilea en Burgos o Juan Rosenbach en Barcelona, por citar algunos ejemplos), las obras son representativas de la producción de la época, compuesta principalmente en latín, español y catalán.
Siguiendo la estela de otras grandes bibliotecas, se ha realizado una digitalización de gran calidad a color y a doble página en la que se incluye una regla en las primeras páginas de cada obra para favorecer la identificación del formato así como la medición de tipos, un método empleado con frecuencia para identificar incunables, muchos de los cuales carecen de portada y colofón.
Además, la preparación de los ejemplares para su reproducción se ha aprovechado para revisar los registros bibliográficos de las obras en el catálogo automatizado de la BNE, siguiendo la normativa actual de catalogación de monografías antiguas y enriqueciéndolos con información detallada de cada uno de los ejemplares digitalizados. Con este trabajo se favorece la difusión de la colección y facilita el trabajo de investigadores de todo el mundo que pueden ahora acceder a estas obras en línea. Las digitalizaciones existentes hasta el momento, procedentes de copias en microfilm, irán siendo reemplazadas lentamente por las nuevas colecciones, la segunda de las cuales, dedicada a incunables con grabados, ya está en marcha.
Para llevar a cabo el proyecto el primer punto clave era qué ejemplares exactamente de entre los más de 3000 incunables con que cuenta la BNE iban a seleccionarse para una colección que pretendía ser limitada y a la vez representativa de los fondos y patrimonio de la BNE.
El departamento de Manuscritos, Incunables y Raros propuso los incunables españoles, con 364 ediciones de la mayor parte de los talleres de imprenta que estuvieron activos en España en el siglo XV, más del 30% de la producción estimada, que ronda las 1050 ediciones.
Así, se ofrecería al investigador la versión digital de obras salidas de las prensas no sólo de los principales talleres de los grandes centros de producción de la imprenta incunable (Sevilla, Barcelona, Zaragoza, Burgos, Valencia o Salamanca), sino también de imprentas más pequeñas con interesantes ediciones como son los incunables hebreos de Híjar o los primeros impresos de localidades menores como Monterrey, en Galicia, o Granada, estos últimos por encargo de su arzobispo, Hernando de Talavera. O bien los impresos por Juan Luschner en el mismísimo Monasterio de Montserrat. En muchos casos se trata además de ediciones de las que, en la actualidad, no se conocen más ejemplares en el resto del mundo.
El próximo 18 de junio Noelia García Núñez, de Biblioteca Digital, y Adelaida Caro Martín, de de Manuscritos e Incunables, presentarán este proyecto, mostrando los trabajos previos de catalogación, la preparación de los materiales y la supervisión de los resultados, que han dado como fruto una nueva visibilidad a esta importante colección. Está abierto al público en general, aunque dirigido especialmente a los profesionales de la información, que estén en vías de emprender un proyecto de digitalización de una colección patrimonial.