El Centro Cultural Coreano presenta la Exposición de Ilustraciones de la artista surcoreana Hye Young Yu titulada «Ping-Pong”. La inauguración tendrá lugar en la galería Han-ul del Centro el 17 de marzo y permanecerá abierta al público hasta el 28 de abril.
Se trata de 34 dibujos que muestran su vida cotidiana, retratos de su familia, la gente que le rodea y las ciudades en las que ha vivido. Aunque su obra está en constante movimiento, es un viaje continuo en el tiempo y el espacio, ping-pong.
En la muestra hace hincapié en la felicidad, happy es la palabra más repetida de su hija Marcel, quién cobra protagonismo en todas sus pinturas; recuerdos de los momentos más sencillos, pero más valiosos de su vida. Marcel aunque es todavía muy pequeña aporta la fuerza que necesita en su pintura. En ella hace uso principalmente de tinta china junto a pintura coreana. Además, posee una clara influencia del Minhwa, una pintura que transmite muchos conceptos y elementos, y que se tarda relativamente poco tiempo en crear.
La historia que escribió especialmente para esta exposición comienza por ella quien se hace llamar “la rara amarilla”. Los amigos que hizo en España la llamaban y la llaman la “rara amarilla”. Viviendo en Barcelona vio una película muy antigua en blanco y negro titulada “La curiosa amarilla” de 1967. Desde ese momento su nombre artístico fue ese mismo, quien aparece en sus obras pintada de amarillo.
De origen coreano la artista Hye Young Yu terminó su carrera de diseño industrial en la Universidad femenina de Suk-myung en 1994, trasladándose a Barcelona en 1998. Ha trabajado como diseñadora en varios lugares como SPEK, Metapolis Exposition, Architecture Festival, Sol90labs, Foundation Interdixit y Foundation Espaicorea, presentando sus obras en varias exposiciones individuales y colectivas tanto en Corea como en España. Además, es autora de tres libros: Spain Design Travel (2010), Spain Tapas Safari (2013) y Mother`s age four years (2016).
“…No imaginé que iba a quedarme en esta tierra tanto tiempo cuando llegué por primera vez a Barcelona en 1998. Desde ese momento mi vida ha sido como un juego de Ping-pong: De Seúl a Barcelona pasando la frontera. Ese juego de Ping-pong ha estado rodeado de gente coreana y española. De este modo encontré a mi marido que es español, tuvimos una hija y sigo haciendo este juego, Ping-pong. Todas las historias relacionadas con el ping-pong las incorporo a la pintura que es mi única herramienta y refugio, basado en este juego. El juego se extiende a mi vida y a mi obra del mismo modo, añadiendo un toque de color y formas delineadas que perfilan mi historia…” (Hye Young Yu)
El Centro Cultural Coreano desea que esta muestra represente una gran oportunidad para conocer las obras de la artista que cuentan su propia vida cotidiana. Las relaciones con la gente y la ciudad en un continuo movimiento de emisión y recepción, como si de un juego de Ping-pong se tratasen.
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CENTRO CULTURAL COREANO
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