La directora de la Oficina de Cultura y Turismo, Anunciada Fernández de Córdova, ha visitado junto con el alcalde de la localidad, Oscar Jiménez, la Iglesia de Santa María Magdalena de la localidad, declarada Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de monumento histórico.
Esta iglesia constituye el único ejemplo de gótico clásico del siglo XIV que se conserva en la Comunidad de Madrid. El Gobierno regional ha realizado diversos trabajos de restauración en los retablos y especialmente el conjunto de rejas del templo, que datan del siglo XVI y XVII, y que constituyen un ejemplo singular de la rejería española.
La iglesia parroquial de la Magdalena en la localidad de Torrelaguna en la Comunidad de Madrid (España) es un edificio de estilo gótico construido en el siglo XIV. Fue declarada Monumento Histórico Artístico el 27 de abril de 1983. Constituye uno de los mejores exponentes del gótico madrileño.
Comenzó a edificarse bajo su forma actual en el siglo XV, continuando las obras durante toda la centuria siguiente, rematada ésta por el cardenal Cisneros, natural de esta villa.
Se construyó sobre otra iglesia anterior. Fue inaugurada en el siglo XVII. Tiene una planta de tres naves que se puede calificar como basilical. Las bóvedas son de crucería gótica que son sostenidas por una serie de arbotantes apoyados en contrafuertes entre los que se abren las diferentes capillas en cuyo interior hay retablos destacables.
La torre campanil es del siglo XV y se debe al maestro Juan Campero que fue contratado por el Cardenal Cisneros. Tiene tres cuerpos y un chapitel. En el tercer cuerpo se hallan los escudos de la villa y de Cisneros.
La portada de la resurrección, del siglo XVI mezcla el gótico mudéjar con el Renacimiento. Los autores del conjunto fueron Juan de Cisniega y Juan Calderón y fue financiado por el Arzobispo Fonseca que dejó en ella su escudo de armas. El templo es sede Arciprestal.
Los retablos son barrocos y platerescos. Entre ellos destaca el retablo mayor, plateresco, obra de Narciso Tomé. En 2014, durante unos trabajos de rehabilitación, se descubrieron unos dibujos e inscripciones en la parte trasera del retablo renacentista realizados por artistas españoles del siglo XVI, según las primeras estimaciones. Los dibujos representan dos rostros masculinos y el bosquejo de un ave rapaz. Las inscripciones no han sido todavía descifradas.