En total, el castillo ha recibido a 21 clubes nacionales e internacionales que han luchado hasta la victoria en las diferentes modalidades de este deporte de contacto, inspirado en los torneos medievales de la Europa de los siglos XIV y XV.
Esta ocasión ha sido la tercera vez en la que el Castillo de Belmonte alberga un acontecimiento de esta índole, de gran alcance a nivel nacional e internacional. Tras la celebración del mundial de combate medieval en 2014 y un torneo internacional anual, además de otros eventos de carácter nacional, el castillo se ha consolidado como principal impulsor y organizador de este deporte en España.
Durante los cuatro días de combate, el español Víctor Terrón ha destacado en la categoría de duelo uno contra uno, quien se colgó tres medallas –oro, plata y bronce–, mientras que Antonio Madrid Díez consiguió una plata.
Por otro lado, la representación ucraniana y rusa ha resaltado en todas las modalidades de combate medieval, acumulando un gran número de triunfos sobre la liza. El duelista ucraniano Artem Semenenko ha conseguido una medalla –dos de ellas de oro– para cada modalidad (duelo con armas de asta; espada y broquel; espada y escudo; y espada de mano y media).
Asimismo, el gran vencedor en la modalidad de batalla grupal ha sido el club Rising Sun, formado por luchadores de nacionalidad ucraniana, danesa y rusa. Por su parte, en las luchas de 5 vs. 5 ha repetido un año más como ganador el equipo ruso Partisan-1.
Además de los combates en sí mismos, los asistentes al II Torneo Internacional de Combate Medieval han podido disfrutar de otro tipo de actividades como pasear por el mercado internacional medieval, disfrutar de una exposición de cetrería con 12 aves rapaces diferentes, visitar las dependencias del castillo y degustar un auténtico menú medieval y comida típica de la zona, entre otros.
Acerca del Castillo de Belmonte
El Castillo de Belmonte es uno de los más emblemáticos de España. Fue declarado Monumento Nacional de interés artístico en 1931 y Bien de Interés Cultural (BIC) posteriormente. Comenzó a construirlo en 1456 Hanequín de Bruselas el principal maestro de la llamada escuela toledana, por orden de Don Juan Pacheco, señor de Belmonte y primer marqués de Villena, y se concluyó hacia 1466. Su estilo es gótico con elementos mudéjares y platerescos. Tiene unas techumbres gótico-mudéjares de gran valor que se sitúan entre las mejores de España. En las jambas de dos de sus ventanas hay un bestiario medieval atribuido a Juan Guás, muy similar al de San Juan de los Reyes en Toledo. Su planta, con seis torreones en forma de tenaza más la torre del homenaje es única en España. El castillo pertenece a la Casa Ducal de Peñaranda y Montijo descendiente de Don Juan Pacheco, y está completamente rehabilitado y musealizado.
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