El Tren de la Fresa ha finalizado el pasado fin de semana la campaña 2016, trigésimo segunda en su historia, con un balance de 7.200 viajeros transportados y una ocupación media del 74 por ciento en un año en el que se han incrementado las plazas ofertadas por tren un 17,8 por ciento, hasta alcanzar las 370. Estas cifras, que suponen un incremento de 1.151 viajeros en relación al año 2015, marcan un punto de inflexión positivo con respecto a campañas anteriores en una temporada con grandes transformaciones en lo que se refiere al paquete turístico vinculado a la circulación del tren y a la propia composición histórica.
La campaña 2016 se inició el 23 de abril -con una primera fase que se extendió hasta el 19 de junio, y una segunda, que tuvo lugar entre el 24 de septiembre y el 16 de octubre- contabilizándose 26 viajes. Estos se realizaron, como ya es tradicional, los sábados y domingos, incluyendo la posibilidad de realizar diferentes actividades e itinerarios.
Novedades presentadas esta temporada
Este año y por primera vez a lo largo de su historia, el tren tuvo como punto de partida la estación de Príncipe Pío. Además, ha encabezado el tren la locomotora eléctrica 289-015, una máquina histórica de los años 70 perteneciente al Museo del Ferrocarril y se ha sumado al tren un coche de viajeros de segunda clase perteneciente a una de las primeras series de coches metálicos encargados por Renfe entre 1947 y 1953. La composición del tren la completaron los habituales cuatro coches de madera denominados ‘Costa’, construidos entre 1914 y 1930, que cubrían los servicios de cercanías de la compañía MZA (Madrid-Zaragoza-Alicante) y un furgón de los años 60 restaurado durante el verano y destinado en su origen al Jefe de Tren.
Además de la tradicional ruta con visita guiada al Palacio Real y una visita libre al Museo de Falúas o la nueva propuesta presentada en primavera, con un paseo por el Tajo a bordo del Barco Turístico de Aranjuez y las visitas guiadas a los Jardines del Príncipe y de la Isla, en la temporada de otoño el viajero pudo elegir una tercera ruta que incluía un viaje a bordo del Chiquitrén, un pequeño tren turístico que realiza un recorrido comentado por parte del casco histórico y por el gigantesco y espectacular Jardín del Príncipe.
El Tren de la Fresa 2017
Para el próximo año se buscará generar nuevas ofertas dentro de los recursos turísticos de Aranjuez, con rutas en calesas, visitas a bodegas monumentales o itinerarios por el casco histórico ribereño.
También se estudia integrar dentro del equipo del tren la presencia de voluntarios, personas que recibirán una formación ferroviaria y turística para desarrollar estas tareas a bordo de la composición histórica, acompañando la operativa del tren, al hilo de lo que ya hacen otros ferrocarriles históricos del resto del mundo, ganando así en calidad del servicio y marcando un nuevo punto de inflexión en los esquemas de explotación y gestión de este tren histórico que busca ir adaptándose a las nuevas demandas y modos de operación de nuestros días.
Dentro del tren se plantean mejoras y recursos complementarios para el viajero como un sistema de megafonía a bordo, tematización interior de los coches, uniformidad del personal, uso de nuevas tecnologías para hacer más interactivo el viaje y otras intervenciones que se irán implementando progresivamente con el objetivo de ganar calidad y fidelidad histórica.
Un ejemplo de turismo cultural
Más de 165.000 pasajeros han viajado a bordo de los históricos coches de madera de Tren de la Fresa desde que en 1984 se promoviera la idea de rememorar el recorrido del que fue el primer ferrocarril de Madrid y el segundo de la Península. Hoy el recorrido se ha transformado en un atractivo viaje en tren al que se suman la riqueza arquitectónica, artística, paisajística, cultural y gastronómica del Real Sitio de Aranjuez, una ciudad que conserva todo el sabor y esplendor de su regia historia.
En 2015, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) dio un paso más en la protección y reconocimiento de la ciudad de Aranjuez al declararla como «lugar de excepcional valor universal». Cinco años antes, en la Exposición Universal de Shanghái 2010, el Tren de la Fresa fue elegido para estar presente en el stand de ICOM (Consejo Internacional de Museos), donde se mostraba la realidad de los museos en los cinco continentes, como ejemplo de contribución de un museo a la revitalización y el dinamismo económico a través de un producto de turismo cultural.