Mádaba ha sido nombrada, tras la evaluación del World Crafts Council (WCC), ‘Ciudad Artística Mundial’ (World Craft City). La solicitud del título se presentó al WCC a principios de 2016 y fue autorizada por primera vez por la Secretaría del WCC, antes de pasar al Consejo Ejecutivo para su aprobación definitiva.
Mádaba, también conocida como ‘la ciudad de los Mosaicos’, cuenta con una historia muy vinculada a la cultura del mosaico. De hecho, la ciudad es principalmente conocida por sus iglesias, de los siglos VI y VII, que destacan por los mosaicos de sus suelos, muy ricos y coloridos.
La Escuela de Mosaicos de Mádaba fue creada con el fin de formar a los artesanos locales en los métodos y técnicas de su conservación, así como en la producción de elementos originales. Este esfuerzo, junto con el gran número de recursos para la educación sobre el mosaico que destina el gobierno local, garantiza un desarrollo fuerte y continuo de esta artesanía.
La designación de Mádaba como ‘Ciudad Artística Mundial’ espera de la urbe que cumpla con su compromiso con el título, lo que incluye la expansión de los intercambios internacionales, así como el trabajo y la comunicación con otras ciudades artísticas o Craft Cities. Todo ello contribuirá a dotar al gremio de artesanos de una plataforma de trabajo mucho más eficiente.
World Crafts Council (WCC)
World Crafts Council (WCC) es una organización internacional, no gubernamental y sin fines de lucro, reconocida por la UNESCO y fundada en 1964, con cinco ramas regionales (África, Asia, América Latina, América del Norte y Europa). Sus objetivos generales son fortalecer el estatus de la artesanía como parte vital de la vida cultural y económica; y promover un sentimiento de comunidad entre los artesanos del mundo, a quienes apoya, ayuda y aconseja.
Historia del mosaico de Mádaba
Los primeros mosaicos fueron descubiertos por casualidad durante la construcción de nuevas viviendas permanentes, en las que se utilizaron piedras cuadradas de los antiguos monumentos. Los sacerdotes concienciaron a los nuevos habitantes de Mádaba de la importancia de los mosaicos, y se aseguraron de que todos saliesen a la luz, se cuidasen y conservasen. La auténtica joya de Mádaba, un mapa mosaico de Tierra Santa considerado el más antiguo del mundo, fue descubierto en 1896 y llamó la atención de estudiosos de todo el mundo.