Érase una vez… ¿y ahora qué?, nueva exposición del Botánico y el Museo de Ciencias Naturales

El Real Jardín Botánico-CSIC presenta desde el 15 de diciembre la exposición Érase una vez… ¿y ahora qué? Repartida en dos sedes, el propio Real Jardín Botánico y el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC), esta muestra se compone de 203 láminas con dibujos de animales de peluche y plantas artificiales realizados con lápices de colores.

“Mi intención con esta exposición es llamar la atención sobre la pérdida de especies que está sufriendo el planeta” explica Ana de Alvear, artista madrileña autora de esta exposición. “¿Quieres ser tú el que le cuente a tus nietos que hubo una vez unos animales como los peluches que ilustro que se extinguieron por nuestra causa? ¿Y que cuando nos dimos cuenta ya no había animales, y tuvimos que clasificar peluches para no olvidarlos?”, continúa la autora.

¿Y el propósito de la muestra? Exponer, a través de un juego cargado de aparente inocencia, que tan solo unos cientos de años después de aquellos fascinantes descubrimientos, esas mismas plantas y animales corren un serio riesgo de extinguirse y quedar almacenados únicamente en el imaginario del ser humano, tal y como ocurre con el mundo jurásico.

El centenar de láminas que se exhiben en el Jardín Botánico son dibujos de plantas de plástico que simulan a las ilustraciones científicas que se realizaban con motivo de las grandes expediciones en las que, además, se traían especies de plantas de todo el mundo que ahora se pueden visitar en las ocho hectáreas del Botánico de Madrid.

Concienciar a través del simbolismo del arte

El director del Real Jardín Botánico, Jesús Muñoz, apunta que “la exposición de Ana de Alvear encaja en la línea investigadora y de divulgación del centro, así como en el objetivo de concienciar a través de esta muestra artística que la conservación de nuestro medio ambiente es tarea de todos. Por eso nos hemos sumado al simbolismo creado por la artista, para despertar en nuestras conciencias una respuesta de empatía para cuidar y conservar nuestro hábitat”.