En julio de este año, Sotheby’s ofrecerá una de las mayores obras de J.M.W. Turner que todavía se encuentra en manos privadas. Pintado en 1835, Ehrenbreitstein es un trabajo tardío del artista, del período que es considerado como el mejor de Turner.
Otras obras de esta misma época se encuentran actualmente en los museos más importantes del mundo y sólo un número reducido de obras de esta relevancia y calidad, permanecen en manos de coleccionistas privados.
El tema de la pintura, que tuvo una enorme aclamación por parte de la crítica cuando se expuso en 1835, representa las ruinas de la fortaleza de Ehrenbreitstein cerca de Coblenza, un lugar con un significado especial para Turner. Aunque hizo muchos dibujos y acuarelas de paisajes alemanes, ésta es la pintura al óleo más importante que pintó Turner sobre Alemania. Sotheby’s subastará este cuadro en Londres el 5 de julio con una estimación de 15-25 millones de libras esterlinas.
Referido habitualmente como el “pintor de la luz”, Turner es considerado por muchos el principal pintor de Gran Bretaña, cuyo estilo único y sin precedentes no sólo ha tenido un impacto profundo y duradero en el arte británico sino que también ha sido un precursor vital tanto en los movimientos impresionistas como en los expresionista abstractos (Monet abiertamente reconoció su deuda con Turner). Obras principales de tan asombrosa calidad de Turner son singulares en el mercado internacional. El último ejemplo que se ha ofrecido (Rome, from Mount Aventine, pintado el mismo año que Ehrenbreitstein y ofrecido en Sotheby’s en 2014) alcanzó el récord de 30,3 millones de libras esterlinas, el precio más alto conseguido por un artista británico, colocando a Turner, junto a Rubens y Raphael, como uno de los tres artistas de la era pre-impresionista alcanzando precios de este nivel.
Julian Gascoigne, especialista en Pintura Británica, señala: «Turner es una de esas figuras influyentes que cambió la forma en que vemos y pensamos sobre el mundo. Un artista arraigado en la filosofía estética y la cultura de su tiempo, perpetuamente comprometido con el arte, tanto de sus predecesores como de sus contemporáneos. Fue al mismo tiempo posiblemente el primer pintor «moderno»; inspiró directamente al Impresionismo del siglo XIX y presagió el Expresionismo Abstracto del siglo XX. Estas últimas obras en particular, con su audaz aplicación del color, tratamiento de la luz y deconstrucción de las formas, revolucionaron la forma en que percibimos la imagen pintada. Aplicando las técnicas de un acuarelista en el uso de los aceites, realizando capas sucesivas de color translúcido en la superficie que impregnan sus lienzos con una luz intensa y difuminada, dotó a sus obras de una conmoción y un poder sin precedentes y con pocos competidores desde entonces».
Alex Bell, Co-Presidente del Departamento Internacional de Pintura Antigua agregó: «Esta pintura fue una de las cinco que Turner expuso en la Royal Academy en 1835. Las otras cuatro se encuentran actualmente en algunas de las instituciones más distinguidas del mundo. De esas cinco pinturas, “Ehrenbreitstein” es la que capturó la imaginación tanto del público como de la crítica y es fácil ver porqué. Su extraordinaria amplitud y profundidad de color y su inspirado e imaginativo uso de la luz en cualquier caso marcaría este cuadro como una obra maestra, pero su verdadera grandeza reside en la forma en que Turner aplica su genialidad pictórica para transformar las ruinas de la famosa fortaleza en una imagen poética y simbólica tan resonante entonces como lo es hoy».
El área del Rin, y especialmente la fortaleza de Ehrenbreitstein, fue de repercusión especial para Turner. Visitó la zona por primera vez en 1817 y regresaría en repetidas ocasiones en los años posteriores, produciendo innumerables dibujos en sus cuadernos de bocetos y numerosas acuarelas. Esta pintura hace referencia específicamente a una serie de bocetos que hizo durante su tercer viaje a Alemania en 1833, cuando viajó por el Rin de camino a Viena y posteriormente a Venecia, a través de Salzburgo.
Génesis y procedencia
La pintura fue encargada originalmente por el ilustre editor John Pye, un amigo cercano de Turner, quien quiso que el artista hiciera una acuarela que pudiese luego ser utilizada como base para un grabado. Sin embargo, comprometido con la belleza y la resonancia simbólica del tema, Turner sintió que sólo podía hacer justicia a su escala y grandeza pintando al óleo, con toda su profundidad de poder emocional y complejidad de luz diáfana. Lo que entregó a Pye fue este magnífico lienzo de 93 x 123 cm que luego se expondría en la Royal Academy.
La representación inesperada de Turner causó a Pye mucha frustración, ya que realizar un grabado a partir de una pintura de este tamaño y complejidad no era una tarea fácil, lo que llevó unos once años, con abruptos cambios a lo largo de este periodo.
El acuerdo, sin embargo, siempre fue que el cuadro se devolviese a la galería de Turner una vez se finalizara el grabado, donde fue visto y adquirido por el hombre que se convertiría en uno de los mayores mecenas de Turner, Elhanan Bicknell.
Bicknell podría haber conocido la obra de Turner por John Ruskin, residente en Herne Hill y un firme defensor del trabajo de Turner. En el periodo de apenas dos años, entre 1841 y 1844, Bicknell adquirió no menos de siete obras maestras a gran escala de Turner, la mayoría de los cuales ahora se encuentran en algunos de los museos más importantes del mundo, incluidos Tate Britain, Yale Centre of British Art, Frick Collection y Metropolitan Museum de Nueva York.
Tras la muerte Bicknell en 1863, su extensa colección, incluida esta pintura, se dispersaron en subasta, lo que generó gran emoción y obtuvo precios sensacionales. Desde entonces, esta obra ha aparecido sólo dos veces en el mercado, más recientemente en 1965, donde alcanzó el precio de 88.000 libras esterlinas, estableciendo un nuevo récord mundial para una obra del artista.
Ventas recientes de los principales óleos de Turner:
Rome, from Mount Aventine, 1835, óleo sobre lienzo. Vendido por Sotheby’s en Londres el 3 de diciembre de 2014 por 30.322.500 libras esterlinas (estimación: £15 – 20 millones).
Modern Rome – Campo Vaccino, 1839, óleo sobre lienzo.Vendido por Sotheby’s en Londres el 7 de julio de 2010 por 29.721.250 libras esterlinas (estimación: £12 -18 millones).
Contexto de las obras de Turner en el mercado:
De los 30 artistas cuyas obras han alcanzado precios superiores a los 50 millones de dólares, sólo tres de ellos pertenecen a la era pre-impresionista: Turner, Rubens y Raphael.
Además, Turner es actualmente el artista británico más importante. Los 30,3 millones de libras conseguidos por Rome, from Mountain Aventine representan el mayor precio alcanzado en subasta por la obra de un artista británico.
Reclamo internacional:
La gran acogida de las obras de Turner por el público asiático se ha manifestado durante los últimos años tanto en las subastas de Sotheby’s como en otros escenarios de arte: el año pasado, un cuarto de los compradores de obras de Turner a través de Sotheby’s procedían de Asia; y en 2009, la exposición de sus obras en el Museo Nacional de Arte de China, en Beijing, recibió una gran acogida. En septiembre de 2018, la obra de Turner se volverá a exhibir en China, en la muestra Paisajes de la mente: Pintura del paisaje británico 1700-1990, que pondrá el foco en el “notable desarrollo de la contribución de Gran Bretaña al arte europeo en el ámbito de los paisajes”. Esta vez, las pinturas de Turner se expondrán junto a las de otros reconocidos artistas británicos como John Constable, Thomas Gainsborough, John Everett Millais, James Abbott, McNeil Whistler y Frank Auerbach.
En Rusia, una de las principales exposiciones de Turner procedente de Tate Collection se exhibió en el Museo Estatal de Bellas Artes de Pushkin (Moscú) en noviembre de 2008. Esta exposición, la primera de este tipo mostrada en Rusia, fue el resultado de un acuerdo de colaboración entre Tate, Pushkin Museum, Don Alisher Usmanov y Art and Sport Foundation (Moscú) con el British Council. El año pasado, cerca de un 15% de los compradores de las obras de Turner en Sotheby’s procedían de Rusia y de la Comunidad de Estados Independientes.
Foto: “Ehrenbreitstein” es una pieza crucial de la última etapa de Turner, que fue aclamada como una obra maestra por sus contemporáneos y que tenía un significado personal especial para él. Con su destacable procedencia, es el más importante de todos sus paisajes alemanes y una de sus pinturas más relevantes. “Es el mejor Turner que he visto en mucho tiempo”, John Ruskin, 2 de mayo de 1844