La Unión Europea ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2017, según ha hecho público en Oviedo el jurado encargado de su concesión.
El jurado de este Premio –convocado por la Fundación Princesa de Asturias– estuvo presidido por Javier Fernández Fernández, presidente del Principado de Asturias, e integrado por Íñigo Abarca Junco, Fernando de Almansa Moreno-Barreda, vizconde del Castillo de Almansa, Antonio Basagoiti García-Tuñón, Santiago Bergareche Busquet, Antonio Brufau Niubó, Sol Daurella Comadrán, José Manuel Entrecanales Domecq, Isidro Fainé Casas, Felipe Fernández Fernández, Pedro Luis Fernández Pérez, Emilio Ferré Solé, Ignacio Garralda Ruiz de Velasco, Alicia Koplowitz Romero de Juséu, marquesa de Bellavista, Wenceslao López Martínez, Laureano Lourido Artime, Teresa Mallada de Castro, Adolfo Menéndez Menéndez, Carmen Moriyón Entrialgo, María del Pino Calvo-Sotelo, Pilar Platero Sanz, Mariano Puig Planas, Matías Rodríguez Inciarte, Gonzalo Sánchez Martínez, Pedro Sanjurjo González, Andreas Schierenbeck, Antonio Suárez Gutiérrez, Ángel Antonio del Valle Suárez, José María Villanueva Fernández y Pedro de Silva Cienfuegos-Jovellanos (secretario).
Esta candidatura ha sido propuesta por Jonás Fernández Álvarez, eurodiputado del Parlamento Europeo. Ha sido apoyada, entre otros, por Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, expresidentes del Gobierno español; Josep Borrell, Nicole Fontaine y Hans-Gert Pöttering, expresidentes del Parlamento europeo; Joaquín Almunia, exvicepresidente de la Comisión Europea; Martín Torrijos, expresidente de Panamá, y Julio María Sanguinetti, expresidente de Uruguay.
“Europa no se hará de una vez ni en una obra de conjunto, sino mediante realizaciones concretas, que creen en primer lugar una solidaridad de hecho”. Estas palabras pronunciadas por Robert Schuman en su declaración del 9 de mayo de 1950 dejan entrever el sueño de una Europa unida tras uno de los períodos más cruentos de la historia contemporánea. Sesenta años después de la firma del Tratado de Roma, la UE representa un modelo único de integración política supranacional con base en una asociación pacífica, progresiva y libre de sus miembros. La suma de diversos elementos como el mercado común (libre circulación de personas, mercancías, trabajadores y capitales), la moneda única, las políticas regional, agrícola y comercial, entre otras, o las garantías de estabilidad, prosperidad y respeto de los derechos humanos, así lo ponen de manifiesto. Durante estas seis décadas se ha logrado la reconciliación franco-alemana o la ampliación de las fronteras de la Unión hacia el este de Europa, entre otros hitos.
La firma del Tratado de París en 1951 creó la Comunidad Europea del Carbón y del Acero (CECA): una entidad supranacional promovida por Robert Schuman y Jean Monnet, ministro de Asuntos Exteriores y comisario general de Modernización y Equipamiento del Gobierno francés, respectivamente en aquel momento. Pensada sobre la idea de que, a medida que aumentara la interdependencia económica entre los países, disminuirían las posibilidades de conflicto, la CECA regulaba los sectores del carbón y el acero de Francia y Alemania, y estaba abierta a otros Estados miembros. Fue el antecedente directo de la Europa de los seis: Francia, Alemania Occidental, Italia, Bélgica, Luxemburgo y Países Bajos. Posteriormente se crearían la CEE (Comunidad Económica Europea) –a la que España se adhirió en 1986– y la CEEA (Comunidad Europea de la Energía Atómica), cuya unión se pactó en 1957 mediante el Tratado de Roma. En 1993 la CEE se convirtió en la Unión Europea (UE). Desde 2009 la UE se rige por el conocido como Tratado de Lisboa, que sustituye al intento fallido de crear una constitución europea a comienzos del siglo XXI.
En los últimos tiempos, la UE ha fomentado una relación más integradora y constructiva con vecinos como Turquía, Oriente Próximo o el norte de África. Actualmente, 28 Estados miembros y más de 500 millones de personas son beneficiarios de una integración europea que, basada en el Estado de Derecho, ha demostrado ser un proyecto de paz en sí misma. Con todo, la Unión no solo gira en torno a la paz entre naciones sino que también constituye una comunidad de valores, asentados en la libertad y la justicia. En este sentido, la UE debe seguir haciendo frente a nuevos retos como la salida definitiva de la crisis económica y social que se vive en el continente desde hace varios años o el reciente anuncio del Reino Unido sobre su salida como Estado miembro de la Unión, que ponen a prueba a una UE en constante evolución.
Desde la entrada en vigor del Tratado de Lisboa en 2009, la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE reúne en un único documento todos los derechos que figuraban en los tratados europeos anteriores, y desde 1998 el Parlamento Europeo apoya los derechos humanos mediante el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia. En 2012 la UE recibió el premio Nobel de la Paz por su contribución al avance de la paz, la reconciliación, la democracia y los derechos humanos en Europa.
En esta edición concurrían un total de un total de 28 candidaturas procedentes de 16 países, Este ha sido el último de los ocho Premios Princesa de Asturias que se conceden este año, en que cumplen su trigésimo séptima edición. Anteriormente fueron otorgados el Premio Princesa de Asturias de las Artes al artista sudafricano William Kentridge, el de Comunicación y Humanidades al grupo musical y humorístico Les Luthiers, el de Cooperación Internacional a la Hispanic Society of America, el de los Deportes a la selección masculina de rugby de Nueva Zelanda, el de Ciencias Sociales a la pensadora e investigadora británica Karen Armstrong, el de las Letras al poeta y ensayista polaco Adam Zagajewski y el de Investigación Científica y Técnica a los físicos estadounidenses Rainer Weiss, Kip S. Thorne y Barry C. Barish y la Colaboración Científica LIGO.
Cada uno de los Premios Princesa de Asturias está dotado con una escultura de Joan Miró –símbolo representativo del galardón−, la cantidad en metálico de 50.000 euros, un diploma y una insignia. Los galardones serán entregados en otoño en Oviedo en un solemne acto presidido por SS.MM. los Reyes.
Méndez de Vigo: “La Unión Europea nació para propiciar la concordia entre los enemigos de la víspera”
El ministro de Educación, Cultura y Deporte y portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha celebrado el fallo del Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2017 a la Unión Europea y ha recordado que “la UE nació precisamente para eso, para preservar la paz de un continente desgarrado por dos guerras mundiales, para propiciar la concordia entre los enemigos de la víspera”.
El ministro ha hecho referencia al aniversario de las primeras elecciones democráticas que se celebraron en España porque además de establecer “la concordia entre los españoles, reflejada un año más tarde en la Constitución de 1978, fue la que nos abrió la puerta para entrar en la Unión Europea”.
Méndez de Vigo, secretario de Estado para la UE en el periodo 2011-2015 y parlamentario europeo desde 1992 hasta 2011, ha afirmado que “hoy que la UE pasa por momentos de confusión, es bueno que recordemos lo que ha hecho para que tomemos fuerzas para dar respuestas al futuro”.
Finalmente, el Ministro ha asegurado que España, “que desde el año 86 está a la vanguardia de la construcción europea, sabrá contribuir a dar respuestas siempre en el sentido de la paz, de la concordia, de la justicia, de las libertades y de la solidaridad, que son las marcas que han impregnado Europa en estos últimos 60 años”.
Según reza el acta de concesión de la Fundación Princesa de Asturias, el jurado “decide conceder el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2017 a la Unión Europea, cuando se cumplen sesenta años de la firma del Tratado de Roma. La Unión Europea ha logrado el más largo período de paz de la Europa moderna, colaborando a la implantación y difusión en el mundo de valores como la libertad, los derechos humanos, y la solidaridad; estos valores de la Unión Europea proyectan esperanza hacia el futuro, en tiempos de incertidumbre, proponiendo un ejemplo de progreso y de bienestar.”