El Monasterio de Piedra, enclave singular de la comarca de Calatayud, ha dado por concluida la primera fase de los trabajos de rehabilitación parcial de su iglesia abacial. Las obras se han ejecutado sobre la Portada de la capilla barroca de San Inocencio y, tras el verano, se continuarán los trabajos en el presbiterio, el altar mayor, la cripta que se encuentra bajo el mismo, y en una de las naves. Esta actuación se enmarca dentro de los actos de conmemoración del 800 Aniversario del Monasterio de Piedra.
En esta primera etapa se ha logrado rescatar, en su totalidad, la portada de la capilla, donde se han llevado a cabo trabajos de restitución volumétrica de algunas figuras, así como la limpieza y recuperación de la policromía original. Además, se han consolidado las grietas existentes en la clave del arco, en la bóveda central y en los muros laterales y, en la parte inferior, se han fortalecido aquellos elementos susceptibles de desprendimiento y se ha recuperado la policromía.
Otra de las obras previstas en el proyecto es la intervención en el presbiterio mediante la rehabilitación de las ventanas, la recuperación de la piedra, la eliminación de elementos postizos, y el saneamiento de los muros. Además, se instalará un suelo de piedra y se mejorará la iluminación.
Por otro lado, se intervendrá en la cripta que se sitúa debajo del altar mayor. Esta fue mandada construir por el Venerable Palafox en 1650 Durante las obras se procederá a realizar una limpieza general, restauración de decoraciones prácticamente desaparecidas, tratamiento del suelo e iluminación y realización de catas arqueológicas.
“Con estos primeros trabajos de rehabilitación se recupera el esplendor barroco de la Portada de la capilla, una pieza singular dentro del conjunto arquitectónico” señala José Pont, director general de Monasterio de Piedra. “La rehabilitación se ha realizado con el máximo rigor, aspirando a que el objeto restaurado se asuma como intacto, evitando los intentos de reconstrucción, salvo cuando se han podido utilizar partes originales de los mismos”.
Las obras de rehabilitación se iniciaron el pasado mes de abril y, sin entorpecer el tránsito diario de visitantes del complejo, se espera que culminen en el primer trimestre de 2018, cuando se celebrará el 800 aniversario de la Ceremonia de Traslación y ocupación física por los monjes cistercienses de los edificios del Monasterio.
“Coincidiendo con el aniversario del monumento, además de otros muchos actos programados, está prevista la inauguración de las obras de la Iglesia. Será uno de los momentos más destacados del programa elaborado para celebrar esta efeméride”, añade Pont.
La capilla de San Inocencio
El origen de la capilla de San Inocencio se remonta a 1684, cuando Jaime Palafox Cardona, arzobispo de Sevilla, regaló al Monasterio de Piedra el cuerpo de San Inocencio Mártir procedente de las catacumbas paleocristianas de Roma, el cual había sido recibido como regalo papal por este arzobispo aragonés. Para acoger la reliquia, se construyó una nueva capilla yuxtapuesta al extremo norte del crucero. Es una obra de barroco decorativo, profusamente ornamentada con relieves de yeso policromado y cubierta con una cúpula ovalada con linterna.
En las pechinas de la cúpula se representan distintos pasajes del martirio de San Inocencio con las virtudes teologales y cardinales, entre ellas la fe y la fortaleza. Los pilares están decorados con figuras de San Bernardo de Claraval, Tescelín, Alicia (su madre) y Santa Humbelina (su hermana). En el arco del triunfo se representó el arrepentimiento de Santa Humbelina.
La vida monástica se mantuvo en el Monasterio de Piedra hasta la desamortización de Mendizábal, en 1835, aunque ya por entonces el cenobio llevaba años en declive, tras haber sido duramente azotado por la Guerra de la Independencia y, después, tras haber sido suprimido de nuevo en 1820, durante el Trienio Liberal.
La desamortización de Mendizábal supuso el punto y final para este monasterio cisterciense. Sus abundantes bienes artísticos acabaron subastados entre 1840 y 1850, y el monasterio sufrió un serio deterioro al permanecer totalmente en desuso durante años. Desde la adquisición de Piedra por parte de Pablo Muntadas en esas fechas, se han realizado distintas actuaciones para la recuperación del patrimonio.
Sobre Monasterio de Piedra
El Monasterio de Piedra es un espacio singular en el que se encuentra el Parque – Jardín Histórico; el Monasterio Cisterciense del Siglo XIII, los restaurantes Reyes de Aragón y Piedra Vieja, y el Hotel&Spa. Catalogado como Conjunto de Interés Cultural y Bien de Interés Cultural en la categoría de Monumento, el Monasterio de Piedra es uno de los parajes más espectaculares de Europa, siendo además galardonado con la Medalla al Mérito Turístico por el Gobierno de Aragón en el año 2011. En la actualidad, alrededor de 275.000 personas visitan el Parque cada año.
Para más información, visite: http://www.monasteriopiedra.com/