La presidenta regional, Cristina Cifuentes, ha expresado todo su apoyo y el del Gobierno de la Comunidad de Madrid a la reivindicación del mundo del cine para que este sector se beneficie también de la bajada del IVA cultural -del 21 % al 10 %-, como ya ha ocurrido con otros espectáculos, “una medida –ha señalado- que me consta que el Gobierno de la Nación ya ha dicho que quiere impulsar, si los Presupuestos Generales salen adelante”. Cristina Cifuentes ha abierto las puertas de la Real Casa de Correos, sede del Gobierno que representa a todos los madrileños, al cine español para mostrar el apoyo a un sector “que es cultura y sociedad, economía, competitividad y potencia el empleo”.
Con estas palabras ha recibido la presidenta regional a los artistas nominados a los Premios Goya en su edición número 32, en una sede que se ha convertido hoy “en un inmenso plató cinematográfico”. Esta recepción es previa a la gala de los Goya que tendrá lugar en Madrid el próximo 3 de febrero, organizada por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas.
Cifuentes ha recordado que la Comunidad de Madrid “es la gran sala del cine español, con más de 20 millones de espectadores al año”. “Es la principal taquilla cinematográfica de España, dado que uno de cada cinco espectadores de nuestro país es madrileño”, ha afirmado.
La presidenta ha recordado, además, que “Madrid es un territorio de cine, donde se han rodado algunas de las mejores películas del cine español y también del mundial”. Por ello, desde el Gobierno que preside se han dado nuevos pasos para apoyar el largometraje, con la puesta en marcha de ayudas anuales a su desarrollo y promoción, además de las que potencian jóvenes valores del cine con el apoyo al cortometraje.
También se ha referido a la creación de Film Madrid, la Oficina de Promoción de Rodajes de la Comunidad de Madrid, y ha recordado a todos los presentes la disponibilidad de la misma para los próximos rodajes en la región.
Cifuentes ha querido felicitar a los nominados a los premios Goya, que cumplen su trigésimo segunda edición, por “el enorme esfuerzo e intenso trabajo que han realizado”. “Este encuentro es una celebración del talento de nuestro cine, de su diversidad, profesionalidad y tesón y esta selección de nominados confirma la calidad del cine con acento español, contribuyendo al prestigio de la marca España en todo el mundo”, ha indicado.
Asimismo, ha hecho extensible esta felicitación a la Academia de Cine por su “enorme trabajo en la promoción del cine español que se realiza en los premios Goya”, y en especial a su presidenta, Yvonne Blake – a quien le ha deseado una pronta recuperación-. Además, se ha tenido una mención especial para Marisa Paredes, que recibirá el Goya de Honor, de quien ha alabado su trayectoria profesional internacional y a quien ha dado la enhorabuena “por ofrecer tanto a los espectadores” en cada uno de sus papeles.
El Gobierno que preside Cifuentes apoya las actividades cinematográficas en el ámbito de la región organizando varios festivales, programas de actividades y difusión y cuenta con diversas líneas de subvención. La calidad y constancia de estas líneas de trabajo se han concretado este año en las nominaciones a los Premios Goya. Así, hasta cinco producciones nominadas han contado con el apoyo económico de la Comunidad de Madrid y otras tres han contado con el asesoramiento de Film Madrid, la Oficina de promoción de rodajes del Gobierno regional.
MADRE, MEJOR CORTO EN LOS PREMIOS FORQUÉ
La película No sé decir adiós obtuvo una ayuda a la promoción de largometrajes por parte de la Comunidad y ha sido nominada en tres categorías distintas para los Goya: mejor director novel (Lino Escalera), mejor actriz protagonista (Nathalie Poza) y mejor actriz de reparto (Lola Dueñas). Esta línea de ayuda a la promoción, que pretende impulsar la distribución y difusión tanto nacional como internacional de los filmes, fue creada en 2016 por el Ejecutivo regional.
Por su parte, la película Deep, dirigida por Julio Soto y nominada a mejor película de animación, también recibió ayuda a la promoción por parte de la Comunidad de Madrid.
Además, dentro del ámbito del cortometraje, hay varias nominaciones asociadas a convocatorias de ayudas públicas de la Comunidad de Madrid. Australia y Madre, dentro de las candidatas a mejor cortometraje de ficción, obtuvieron ayuda a la producción y, en ambos casos están incluidas dentro del programa de difusión ‘Madrid en corto’ del Ejecutivo regional.
Cabe destacar que el corto Madre, dirigido por Rodrigo Sorogoyen y con subvención de la Comunidad de Madrid, este sábado fue distinguido como Mejor Cortometraje en los Premios Forqué.
En el ámbito de las nominadas a mejor cortometraje documental, Primavera rosa en México recibió ayuda a la producción y, además, forma parte del catálogo Off ECAM, dedicado a antiguos alumnos de la Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid (ECAM).
En este sentido, los premios Goya han distinguido a diversos antiguos alumnos y profesores de la ECAM con varias candidaturas, como por ejemplo Paco Plaza, nominado como mejor director por Verónica y director de la Escuela, o David Alonso, codirector de Tadeo Jones 2 y antiguo alumno. Además, la Oficina de promoción de rodajes de la Comunidad de Madrid Film Madrid ha participado también en tres producciones nominadas: La llamada, Abracadabra y Madre.
11 LÍNEAS DE AYUDAS A LA CREACIÓN
La Comunidad cuenta con once líneas de ayudas a creadores dentro del ámbito de la cultura, como las dedicadas a artes escénicas, música y actividad musical, entidades culturales privadas sin ánimo de lucro, creación de moda y artes visuales o becas de residencia en el extranjero para jóvenes artistas y comisarios dentro del ámbito de las artes visuales.
Cuatro de estas once líneas de ayudas se han creado en los últimos años de legislatura, entre las que destacan las dirigidas al ámbito de la creación cinematográfica. En 2016 el Gobierno recuperó la línea de ayudas dirigida a personas físicas para las creaciones y desarrollo de artes escénicas, musicales y cinematográficas. Además, ese mismo año, el Ejecutivo creó ayudas dirigidas a productoras cinematográficas para el desarrollo de largometrajes.