El director general de Bellas Artes y Patrimonio Cultural, del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Luis Lafuente, ha presentado hoy, junto con el obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig, los trabajos de restauración recientemente concluidos del sepulcro del arzobispo Alonso Carrillo y Acuña, en la catedral magistral de Alcalá de Henares.

El proyecto, promovido por el Instituto del Patrimonio Cultural de España en colaboración con la Diócesis de Alcalá de Henares, ha supuesto la recuperación de dos relieves del monumento funerario, uno de los mausoleos más importantes del gótico español.

Estos relieves, que representan alegorías de La Templanza y La Prudencia, fueron recuperados gracias a la iniciativa de la Diócesis de Alcalá, y a la colaboración de la Secretaría de Estado de Cultura, Hispania Nostra, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares y de la Guardia Civil.

En 1997 el Instituto del Patrimonio Cultural de España llevó a cabo una primera intervención restaurando y colocando los fragmentos conservados; desde entonces el conjunto ha podido contemplarse en la Antesala Capitular del Museo de la Catedral-Magistral.

Relieves recuperados en el mercado internacional

En 2014 fue localizado en el mercado internacional del arte el relieve alegórico de La Templanza, una las cuatro Virtudes Cardinales que adornaban el monumento, y a continuación fue recuperada gracias a la colaboración de la Guardia Civil, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, la Diócesis de Alcalá e instituciones privadas y particulares, que llevaron a cabo con éxito una campaña de micromecenazgo.

Poco después se localizó el segundo de los relieves desaparecidos de estas cuatro alegorías, ‘la Prudencia’, en el Museo de Arte Sacro de Corella (Navarra) de la Fundación Arrese, que donó la obra para su reintegración en el conjunto original.

Con ocasión de estas dos recuperaciones, el IPCE ha vuelto a intervenir el conjunto para incluir los dos relieves y actualizar su presentación museográfica.

En el transcurso de los trabajos, que han tenido lugar entre octubre de 2017 y enero de 2018, se ha procedido, en primer lugar, al desmontaje y limpieza de los fragmentos, eliminando morteros, resinas, adhesivos y recubrimientos de diverso tipo, así como depósitos de polvo y suciedad. A continuación se han realizado diversas labores de reintegración.

El sepulcro

Esculpido en alabastro y atribuido al Maestro Sebastián de Toledo, el monumento sepulcral del Obispo Alonso Carrillo de Acuña es una obra señera de la escultura del gótico tardío en Castilla.

Fue realizado en los años ochenta del siglo XV para albergar los restos mortales del arzobispo de Toledo, una de las figuras fundamentales del reino de Castilla en aquel periodo.

Ubicado originalmente en el convento franciscano, que el propio arzobispo fundara (y que más tarde sería conocido como de San Diego) el monumento fue trasladado a la Magistral en 1856, tras la desamortización y disolución del convento. En 1936, durante el incendio de la Magistral, el sepulcro sufrió graves daños y algunos fragmentos desaparecieron.