El Centro de Arte Contemporáneo de Málaga presenta Hullo, Hullo… la primera exposición en un museo en España de la artista británica Rose Wylie comisariada por Fernando Francés. La muestra reúne veintinueve pinturas, algunas de ellas mostradas por primera vez. Wylie, nacida en los años treinta, sorprende y atrapa por la energía, vivacidad y frescura de sus obras. La artista crea a través del filtro de su memoria e introduce letras en sus obras como meros motivos o apoyo en sus pinturas. En ocasiones abandona los pinceles para pintar directamente con sus manos y se inspira en muy diversas y variadas fuentes como la historia, cine, cómics, noticias, anécdotas, vida cotidiana, famosos o deporte.
“En mi vida, acumulo y almaceno anotaciones de experiencias, y con frecuencia repito este proceso en combinaciones de cuadros, tal y como los veo en mi mente”, explica Rose Wylie sobre su proceso creativo. “A la postre, un cuadro no es lo que hace ni lo que crea ni lo que tiene ni lo que significa… simplemente es. El cuadro es, en sí, el significado”.
Para Fernando Francés, director del CAC Málaga, “la esencia de Rose Wylie reside en la poca importancia que tiene para ella si una pintura puede considerarse correcta o no. La artista no tiene un criterio clásico del sentido de la observación, pinta su memoria y sus recuerdos, sin cánones, sin restricciones. Realiza enormes lienzos coloristas donde las pinceladas, y las marcas de los tubos y colores se distribuyen de forma orgánica por el lienzo. Para ella la energía es la vida, la pintura es vida, y la forma que tienes de expresarla es su vida”.
Rose Wylie (Kent, Reino Unido, 1934) siempre quiso dedicarse al arte. Entre 1952 y 1956 estudió en las escuelas de arte Folkestone y Dover School of Art, donde le dijeron que las mujeres no podían convertirse en grandes artistas. En la escuela conoció al que sería su marido hasta el fallecimiento de este en 2014, el artista Roy Oxlade. Wyllie se dedicó a la enseñanza, abandonando la idea de ser artista para poder dedicarse a sus tres hijos. Después de casi 20 años volvió a pintar, matriculándose en el Royal Collage of Art donde se graduó en 1981. Poco después empezó a trabajar sin excesiva dedicación y a exponer de manera esporádica en Londres y en el sur de Reino Unido. Su reconocimiento se produce después de representar a su país, con 76 años, en la exposición Women to Watch en el National Museum of Women in the Arts, Washington DC, en 2010. Desde entonces, ha tenido una rápida proyección internacional en Nueva York, Moscú, Alemania, incluso en la Tate Britain. Ha recibido importantes premios: Premio Paul Hamlyn Award en 2011 y el Premio John Moores Painting en 2014, el mismo año que fue elegida Senior Royal Academician.
Además de en el CAC Málaga, en este año 2018, Wylie expone tanto en Plymouth Arts Centre y The Gallery en Plymouth College of Art de Reino Unido hasta el 30 de abril; la misma muestra también se expondrá en junio en Newlyn Art Gallery & The Exchange in Cornwall, Reino Unido. También, actualmente, Wylie expone su segunda gran muestra en la David Zwirner Gallery de Londres.
Wylie no pinta lo que ve en el mundo exterior, sino lo que está en su mente, esta es su originalidad. En Hullo, Hullo… la artista muestra un total de veintinueve obras, la mayoría de ellas de gran formato. El título de la exposición está relacionado con el gusto de la artista por la repetición como los artistas dadaístas representaban en sus obras. Esta admira a los dadas puesto que eran lo opuesto a la racionalidad (a lo que se consideraba que había sido la causa de la destrucción de Europa), además siempre le ha llamado la atención la subversión de la autoridad de forma tan deliberada como hacían estos artistas. Es así, que para otras exposiciones como Quack Quack (Serpentine Sackler Gallery, Londres) o la obra Ack Ack (2003) ha utilizado títulos con palabras repetidas irreverentes, con ritmo, que tienen rima y gracia se pronuncien en el idioma que se pronuncien. Hullo, Hullo… está compuesta por obras desde 1992 a 2017, veinticinco años de creaciones que repasaran las temáticas más recurrentes y variadas de la artista: los animales, el deporte, la guerra, la historia, el cine, o las muñecas de papel recortable.
A la artista le gusta la naturaleza y los animales, por esto en su obra hay muchos jardines y parques, trabaja con lo que puede ver desde la ventana de su estudio. Si algo le caracteriza, es la falta de elegancia en su obra, algo de lo que se siente muy orgullosa. Ante la elección de representar un animal como un pavo real o un pato, la mayoría representaría este primero, por su belleza y distinción, pero Wylie se siente orgullosa de elegir todo lo contrario, lo común y ordinario como sería el pato. Ejemplo de ello sería una de las obras más tempranas de la exposición, RW & Bird (1996) en donde se aprecian hasta las líneas del papel de libreta que Wylie ha dibujado sobre el lienzo, además de autorretratarse (como el título deja ver), como una figura sin apenas facciones ni rasgos definitorios, pero sobre la que vuelan dos cabezas de pájaros de considerable tamaño.
Siguiendo la misma temática de animales, también se encuentran en la muestra dos obras de más de cinco metros de largo, Spider Frog & Bird (2015) y Red Painting Bird, Lemur & Elephant (2016). En la primera obra Spider Frog & Bird (2015) Wylie ha unido tres paneles para mostrar estos animales alterando su tamaño, utilizando la misma escala para los tres, una araña, una rana y un pájaro de color azul; grandes letras en negro acompañan la parte inferior de la obra (SPIDER FROG BIRD) a modo de subtítulo. En esta obra se aprecia con claridad varios fragmentos de lienzo que ha superpuesto sobre la obra, como en una de las patas de la rana o del pájaro con la intención de corregir algo que no le ha gustado del lienzo. Por otra parte en Red Painting Bird, Lemur & Elephant (2016) ha representado la misma idea sin escala entre los animales en rojo, pero en esta ocasión ha utilizado dos colores para las letras de la parte inferior, el negro y el amarillo. Esta obra está cubierta de numerosos detalles que muestran el proceso creativo de la artista que se han de observar de manera muy cercana, como las marcas de los dedos de Wylie en el colmillo de elefante, al aplicar la pintura directamente con su mano, o las notas musicales en la parte superior izquierda donde ha utilizado varios fragmentos de lienzos que ha superpuesto y ha numerado con lápiz (L (left/izquierda) 1 , 2 y 3). Con respecto a la naturaleza, se expone Tree Canterbury (1997), que muestra un tronco azul sutilmente sombreado de negro y un pequeño pájaro amarillo sobre una de sus ramas. En esta obra se ha liberado de las reglas y tradiciones a las que David Hockney es leal en sus pinturas de árboles coloridos.
En la serie Film Notes la artista reduce una película en su memoria a una sola imagen, y esta es la que después pinta. Así, la escala y el predominio del formato de paisajes sus pinturas puede ser descrito como cinematográfico. Estas técnicas las aplica a la estructura de sus pinturas, donde el texto toma la forma de subtítulos y las composiciones en ocasiones son claramente enfoques panorámicos. Para comenzar a pintar Wylie realiza dibujos previos a la pintura final, como si de un storyboard se tratase. De una misma idea hace varios dibujos que pueden cambiar levemente, para después elegir uno o varios para hacer la pintura. Por esto, el aspecto de su obra es de secuencia, algo que ella denomina “crecimiento orgánico de una idea”. Como ocurre en Pink Table Cloth (Film Notes) (2013) donde de una pequeña acuarela con la escena de arena y el cielo, derivó a varias pinturas, una de detalle de la escena central con una mesa con mantel de tela rosa, y otra la visión panorámica que se muestra en la exposición, enmarcada por líneas para destacar la escena central que se encuentra en la lejanía. A modo de faldón, como un cartel publicitario de una película, se encuentra el nombre de la película a la que hace referencia Syriana (2005) y el nombre de algunos de los actores que forman parte de su elenco: Stephen Gaghan (director) y Matt Damon y George Clooney (actores). En ocasiones, escoge la película porque la considera muy común, con la intención de conectar con el público.
Sitting on a Bench with Border (Film Notes) (2008) está inspirada en el personaje de Penélope Cruz de la película Volver de Pedro Almodóvar de 2006. No debe considerarse un retrato, es un icono de la belleza estereotipada. Resalta sus atributos: pelo, pecho, cintura fina y piernas largas. En la muestra se exhiben dos obras, una de ella, la comentada, tiene como marco múltiples fotogramas del detalle de la cabeza del personaje femenino que solo cambia ligeramente de una imagen a otra. En Sitting on Bench, Red Shadow (2007), con un personaje similar, se aprecian líneas gruesas y rectas en el pelo y en el vestido, herencia de los grabados xilográficos (la palabra xilografía proviene del término griego: xylon, que significa madera y del término grafos, que significa grabado, inscripción o rasguño) de ahí las líneas o rasguños en las famosas xilografías de Albert Durero que se aprecian en diferentes obras de Rose Wylie como en la mencionada.
A Wylie le interesan los directores que crean tres dimensiones, espacios diferentes como Quentin Tarantino o Werner Herzog, de ahí que también represente en su serie Film Notes, Julieta (Film Notes) (2016). Basada en la película de Pedro Almodóvar Julieta (2016). En una escena, en primer plano un animal con cuernos (probablemente un ciervo) es visto a través de la ventana de un tren (representado en el lado derecho de la obra). Poco después, el tren se detiene abruptamente y el mismo animal aparece en el lado opuesto de la imagen, de frente, como una aparición en la luz de los focos del tren. Para Wylie, esta no es la escena más significativa de la película, pero cree que representa irracionalidad, sexo y libertad (representado en el lado izquierdo del lienzo). Un cupido, ubicado en el centro del tríptico, no está presente en esta película. Este sería una metáfora de la figura de Cupido: una figura central y heráldica, tomada de una tarjeta de felicitación irlandesa estéticamente irrelevante para el Día de San Valentín.
Rose Wylie ha realizado exposiciones individuales en Serpentine Sackler Gallery, Londres (2017), David Zwirner Gallery, Londres (2016), Rosenwald-Wolf Gallery, The University of the Arts, Filadelfia, EE.UU. (2012); Jerwood Gallery, Hastings, Reino Unido (2012); Tate Britain, Londres (2013); Haugar Vestfold Kunstmuseum, Tønsberg, Noruega (2013); Städtische Galerie Wolfsburg, Alemania (2014); Douglas Hyde Gallery, Dublín (2015); Space K, Seúl, Corea del Sur (2016); Chapter Arts Centre, Cardiff, Reino Unido (2016); y Turner Contemporary, Margate, Reino Unido (2016). En 2014, obtuvo el John Moores Painting Prize, de la Walker Art Gallery, de Liverpool; y en 2015, una de sus pinturas fue incluida en la London’s Royal Academy of Arts Summer Exhibition, donde también había ganado el Premio Charles Wollaston. Este mismo año también fue elegida Senior Royal Academician.