LaLa UNESCO ha incluido el proyecto Nuestra Señora de las Mercedes del Ministerio de Cultura y Deporte en el Registro de buenas prácticas del patrimonio cultural subacuático, que reconoce las iniciativas emprendidas por los países miembros para promover la protección, difusión y sensibilización de la sociedad en este ámbito. La decisión se ha tomado esta mañana en la VII Asamblea de Estados Parte de la Convención de 2001 sobre la Protección del Patrimonio Cultural Subacuático, que se celebra desde ayer en París.
El caso de la fragata Mercedes es el primer ejemplo de una victoria legal de un Estado en un litigio contra una empresa cazatesoros en favor de la protección del patrimonio cultural subacuático. En este proceso, que se prolongó entre 2007 y 2012, fue clave la participación de diferentes instituciones, coordinadas por el Ministerio de Cultura y Deporte, que hicieron posible la devolución de las 14 toneladas de carga expoliadas por la empresa Odyssey.
El “Proyecto Nuestra Señora de las Mercedes. La respuesta de la ciencia en aguas de gran profundidad frente al expolio del patrimonio sumergido”, recoge el trabajo de recuperación de este patrimonio cultural y la difusión posterior a través de la exposición “El último viaje de la fragata Mercedes”, así como la musealización de los bienes culturales de la fragata en el Museo Nacional de Arqueología Subacuática (ARQVA) de Cartagena.
Se incluyen también las tres campañas al pecio de la Mercedes dirigidas en 2015, 2016 y 2017 por el ARQVA, con la colaboración del Instituto Español de Oceanografía y de la Armada, que han marcado varios hitos en la historia de la arqueología subacuática, tanto por la profundidad a la que se han realizado las excavaciones como por su meticulosidad científica. Los trabajos permitieron extraer desde pequeños objetos hasta dos grandes culebrinas del siglo XVI. Los resultados están disponibles en la web del ARQVA: Proyecto Nuestra Señora de las Mercedes.
España, el país con más proyectos incluidos en el Registro
Con este nuevo proyecto, España suma ya cinco iniciativas en el Registro de buenas prácticas creado en mayo de 2015, y se convierte en el país con más proyectos en la lista, muestra de su compromiso con los principios de la Convención de la UNESCO de 2001, ratificada por España en 2005.
En la Asamblea de Estados Parte celebrada en 2017, ya se incluyeron en el Registro la protección jurídica del patrimonio arqueológico subacuático en Andalucía; el naufragio romano del pecio Bou Ferrer, en Villajoyosa (Alicante); la prospección y excavación arqueológica del pecio Deltebre I, en Tarragona; y la investigación arqueológica en los pecios Cala Cativa I / Cap del Vol, en Port de la Selva (Girona).