Fundación MAPFRE ha presentado en Barcelona, la exposición Pérez Siquier, que presenta la obra del artista almeriense, una de las más potentes e importantes de la fotografía española en las últimas décadas.
Nacido en Almería en 1930, donde ha residido a lo largo de toda su vida, Pérez Siquier ha mantenido desde los inicios, en la década de 1950, su condición de artista que habita en una de las esquinas de España, lo que no le ha impedido plantear violentas rupturas a contracorriente con su tiempo y, a la vez, erigirse como creador de la mano de José María Artero del colectivo fotográfico más influyente de su momento, el Grupo AFAL, reunido en torno a la revista homónima.
Sin trasladarse a ninguno de los grandes centros de producción del país, Madrid y Barcelona, Pérez Siquier se convirtió en una figura fundamental de la fotografía española en contacto directo con sus congéneres, como Joan Colom, Xavier Miserachs o Ricard Terré.
Su trabajo le ha hecho merecedor de recibir el Premio Nacional de fotografía en 2003.
LA EXPOSICIÓN
La exposición permite acercar la obra del fotógrafo almeriense, pieza fundamental en la creación de la modernidad fotográfica y la profesionalización del medio en España. Desde principios próximos al neorrealismo, en sus inicios y, más adelante, como pionero de la fotografía en color.
Esta muestra se plantea como una amplia retrospectiva que recorre sus series más señaladas, realizadas entre 1957 y 2018, con una importante aportación de imágenes inéditas y archivos documentales que enriquecen su discurso.
El recorrido, compuesto por más de 170 fotografías y una sección documental, está organizado a través de seis series dispuestas cronológicamente.
Comienza con La Chanca y la Chanca en Color que recogen las imágenes realizas entre 1957 y 1965. Las series se adentran en este barrio almeriense dando visibilidad el carácter luchador de sus habitantes. Las primeras fotografías son imágenes en blanco y negro cercanas al neorrealismo. Sin embrago a partir de 1960, con una mirada más abstracta comienza su interés por el color como queda reflejado en la segunda sección de la serie.
En Informalismos se encuentran las fotografías de las paredes desconchadas de las casas y de los muros de las cuevas que Pérez Siquier tomó en 1965. Éstas constituyen el capítulo final de La Chanca.
Continúa el recorrido con una de las series más emblemáticas del almeriense, La playa, fotografías tomadas entre 1972 y 1980. En estos años Pérez Siquier trabajó de fotógrafo contratado por el Ministerio de Información y Turismo y emprendió diversos viajes a través del litoral español para obtener imágenes que serán destinadas a la promoción turística.
Carteles y folletos
Algunas de ellas se expusieron en forma de carteles y folletos con el sabor de una época en la que despegó esa industria bajo la promesa de sol y playa. Junto a esas fotografías que fueron utilizadas como pantalla de la apertura económica del régimen para vender una España coloreada, Pérez Siquier tomó numerosas escenas del aspecto más carnal del nuevo turismo y su colonización de las playas desde una nueva cultura visual.
En su conjunto, La playa emana sentido del humor, un contenido de gusto surrealista, una celebración del volumen corporal y la vida que destila y una mirada fina hacia una cotidianidad distinta, basada en la relajación de las normas morales impuesta entre los bañistas.
La exposición sigue con las imágenes tomadas entre 1980 y 2002, que dan lugar a las series Trampas para incautos y Encuentros. Y finalizada con La Briseña, fotografías que sugieren un repliegue hacia el interior, un gesto muy común en fotógrafos que entran en su madurez. Del mismo modo que los coloridos exteriores de la arquitectura vernácula protagonizaban «La Chanca» en color seis décadas atrás, ahora ocupa el encuadre el interior de su residencia veraniega, situada en el desierto almeriense.
En la presentación de la muestra han participado el comisario de la exposición, Carlos Gollonet, conservador jefe de fotografía de Fundación MAPFRE, Nadia Arroyo, directora de Cultura de Fundación MAPFRE, y Carlos Pérez Siquier, el autor, quien ha destacado: «Estoy emocionado. probablemente sea la exposición más grande que haya tenido en mi vida». Además ha señalado que «el tiempo corre en mi contra pero a favor de mi obra».
Hasta el 17 de mayo en la sala Fundación MAPFRE Casa Garriga Nogués.