Con la llegada del otoño las temperaturas comienzan a bajar y un poco de calorcito siempre viene bien. Si a ello se une la necesidad de desconectar de vez en cuando de los problemas diarios, de darse un respiro y relajarse, después de los duros meses pasados, la solución está en un balneario. Y España es uno de los países con mayor número de balnearios y spas de Europa. Hay mucho dónde elegir. Además, este tipo de turismo está en auge, según datos que maneja la web número uno de España en regalos experiencias, www.aladinia.com, el turismo de bienestar ha aumentado en España un 44 % este verano, especialmente en pareja, y este otoño las cifras siguen aumentando.
Pero hay que distinguir entre balnearios y spas. En los balnearios hay aguas termales y mineromedicinales con distintas propiedades y diferentes tratamientos para ciertas enfermedades o molestias. Entre sus propiedades están reducir el estrés, aliviar dolores de espalda, reumáticos y musculares, combatir la ansiedad y la depresión, mejora problemas respiratorios y de la piel, activar la circulación sanguínea, limpiar toxinas regenerando la piel, etc. Los spas, cuyo nombre viene del Latín salus per aquam, (la traducción es bastante evidente) casi siempre tienen agua normal calentada, y sus tratamientos suelen ser relajantes o estimulantes, pero no curan, aunque ayudan al organismo.
Por ello, los usuarios de Aladinia.com han seleccionado los mejores de España. En todos los casos, además de los servicios del balneario se ofrece alojamiento, restauración, posibilidades de gimnasio y algunas experiencias especiales. Por supuesto, todos ellos pueden presentarse en forma de regalo. Estos son los 12 seleccionados:
1. Hotel Balneario de la Virgen (Jaraba, Zaragoza)
Se encuentra en el paraje natural del Cañón y Hoces del río Mesa a hora y media de Zaragoza, protegido por altas paredes de roca caliza, donde anidan numerosas especies de aves rapaces y flanqueado por el río de aguas cristalinas en un ambiente privilegiado para disfrutar de la naturaleza, el deporte al aire libre y, por supuesto el agua termal mineromedicinal de sus numerosos manantiales. Sus orígenes pueden remontarse al siglo II a.C. y entonces denominaron a sus fuentes como agua de las ninfas, atribuyéndoles a éstas sus poderes curativos. Emergen a una temperatura de entre 30 y 34 grados, y un caudal aproximado a los dos millones de litros por día entre los cinco manantiales localizados en el balneario. Destaca su lago termal al aire libre y su romántica cueva. Entre sus atractivos destaca su cocina casera aragonesa y la cercanía al Monasterio de Piedra.
2. Hotel Balneario La Hermida (Cantabria)
A mitad de camino entre Santander, el valle de Liébana y las cumbres de los Picos de Europa con el teleférico de Fuente Dé, a orillas del río Deva en un bello desfiladero se encuentra este balneario, antiguo y abandonado durante mucho tiempo, pero con un diseño moderno y magníficas instalaciones. El balneario de la Hermida es, posiblemente, uno de los mejores de España, y sus aguas están consideradas de las mejores de Europa por sus propiedades minero medicinales. El agua de La Hermida brota espontáneamente de tres manantiales a 60°, con un caudal de ocho litros por segundo y se definen como aguas hipertermales clorurado-sódicas muy mineralizadas. Una de sus zonas de vapor está en contacto directo con el manantial que surge entre las piedras. Magnífico lugar como base para hacer muchas excursiones.
3. Hotel Balneario Vichy Catalan (Caldes de Malavella, Gerona)
El Hotel Balneario Vichy Catalan se encuentra en Caldes de Malavella, en la Costa Brava de Gerona. Aunque en el noreste de España, está ambientado en un edificio de estilo neomudéjar, con decenas de fuentes y arcos de influencia árabe, lo que le da la sensación de estar en algún lugar de Oriente Medio. Vichy Catalán es una de las aguas minerales más famosas de España para beber, por lo que no es de extrañar que este complejo sea uno de los balnearios más populares de España. El centro termal y de balneoterapia ofrece lo mejor en relajación, tratamientos, servicios de hidroterapia y sesiones de bienestar, e incluye instalaciones como sauna finlandesa, jacuzzi, baño de vapor, gimnasio, sala de ping-pong, jardines interiores y exteriores, instalaciones de spa y piscinas. Para los amantes del golf, el campo de golf PGA Catalunya está a solo unos kilómetros de distancia.
4. Balneario de Panticosa (Panticosa, Huesca)
A tan solo ocho kilómetros de la estación de esquí de Panticosa se ubica este balneario, que además es un complejo hotelero con varios edificios y hasta tres restaurantes. Las aguas termales se originan en el manantial de Tiberius y se pueden disfrutar en la piscina termal. En el exterior, es posible nadar en una piscina con una vista impresionante de las montañas de más de 3.000 metros de altura. Las Termas de Tiberio han sido diseñadas recientemente por Belén Moneo y Jeff Brock, creando un lugar de formas suaves y redondeadas, diseñado para integrarse con la naturaleza que lo rodea, un espacio en el que la luz y el agua se funden creando una atmósfera relajante y reparadora. Todos los espacios del Balneario de Panticosa están diseñados para el relax y aprovechamiento del agua curativa, que son hipertermales, emergiendo de la tierra a una temperatura de 53ºC. Presentan propiedades analgésicas y son muy beneficiosas para el tratamiento de enfermedades osteo-articulares reumatológicas, como artrosis y artritis, dermatológicas como psoriasis y dermatitis, patologías respiratorias, como el asma y EPOC y cuadros de estrés y ansiedad, gracias a la presencia de gas radón en sus aguas.
5. Hotel Balneario de Lanjarón (Lanjarón, Granada)
Ubicado en el entorno idílico del Parque Nacional de Sierra Nevada, el complejo lo tiene todo: paisajes impresionantes, vistas magníficas de las montañas, historia, arquitectura fantástica y, por supuesto, paz y tranquilidad. Relajarse en este balneario es toda una experiencia por su privilegiado enclave y situación. Sus aguas termales provienen de la pureza de sus seis manantiales de aguas mineromedicinales del parque natural. Tiene amplias instalaciones en las que disfrutar de una piscina con cascada, cuello de cisne y varios chorros, baño con burbujas, sauna finlandesa, pediluvio y el Flotarium, una piscina de ingravidez, para la relajación muscular total, los excelentes tratamientos termales y la propia ubicación. A destacar su buen restaurante que basa sus menús en productos locales y saludables.
6. Hotel Termes de Montbrió (Montbrió del Camp, Tarragona)
Hace unos años este resort de aguas termales naturales fue elegido como el «Mejor Resort & Spa de Europa». Inmerso en un magnífico jardín botánico de 4 hectáreas con especies centenarias, se abastece de diferentes manantiales que manan a temperaturas comprendidas entre 41 y 81ºC. Sus aguas están catalogadas como hipertermales, ricas en iones, bicarbonato, sulfato, cloro, sodio, calcio, magnesio, litio y potasio, y están especialmente indicadas para procesos reumáticos crónicos, dermatológicos y respiratorios, así como para terapias antiestrés y de adelgazamiento. La estrella del balneario es el Aquatonic, un espacio termal único de 1.000 m2 en el que sumergirse, nadar, o simplemente caminar dentro de las aguas termales naturales, aporta al organismo todas las propiedades terapéuticas de los minerales de sus aguas. Además, se puede disfrutar de múltiples juegos termo-lúdicos: cascadas laminares, jets de hidromasaje rápidos circulares, micro-burbujas, grutas con baños greco-romanos…
7. Hotel Blancafort Spa Termal (La Garriga, Barcelona)
Este es un balneario con mucha historia, llevan desde el año 1840 extrayendo el agua termal con propiedades terapéuticas directamente del manantial. Sus instalaciones te ayudarán a alcanzar un estado de bienestar único en una zona muy tranquila. El secreto para conseguirlo está en la composición del agua termal, cuyas propiedades terapéuticas se conocen desde los tiempos de la Edad de Bronce. El Spa termal Blancafort es un centro de bienestar en el que se fusionan los conocimientos más tradicionales y las terapias más innovadoras con las propiedades mineromedicinales de sus aguas, persiguiendo un único objetivo: cuidar de del visitante, haciéndole sentir único y ayudándole a conseguir un bienestar integral.
8. Hotel Balneario Alhama de Aragón (Alhama de Aragón, Zaragoza)
El Hotel Balneario Alhama de Aragón es posiblemente uno de los más antiguos que existen. Del antiguo y emblemático balneario Termas San Roque y Cantarero surge este nuevo y moderno hotel balneario concebido para el confort y bienestar de sus visitantes. El mayor de sus encantos es, sin duda alguna, la riqueza mineral que ofrecen sus aguas termales en sus múltiples instalaciones. Unas aguas con propiedades que destacan por sus cualidades curativas y que ya utilizaban las tropas del Cid. Aquí se practican, siempre bajo prescripción médica, tratamientos personalizados de purificación, tonificación, relajación y belleza, con la aplicación de aguas termales minero-medicinales en duchas y baños. Sus dos manantiales del siglo XI, el Moro y la Mora, ofrecen, respectivamente, una lluvia fina que cae constantemente de la gruta natural que ha formado durante más de 900 años el agua, y una cascada reparadora.
9. Balneario de Archena (Archena, Murcia)
Se encuentra en el Valle de Ricote, un bello paraje natural en Murcia. Es un complejo de estilo moderno con dos enormes piscinas termales, una zona con circuitos termales y otra con piscinas. También ofrece tratamientos de spa, aunque llama la atención la amplia oferta de sus instalaciones, entre las que destaca una zona infantil con toboganes. Es el retiro ideal para disfrutar de un buen descanso en familia o en pareja. Su restaurante está especializado en cocina creativa. Es muy popular entre quienes padecen problemas de piel o articulaciones, o entre quienes solo quieren mejorar su salud. La zona de spa incluye una serie de piscinas ubicadas en el exterior con chorros de agua, cascadas, jacuzzis, una piscina de flotación, una piscina contracorriente, una piscina de esencias naturales, un iglú y mucho más. También hay saunas, áreas de masajes, hamacas, zonas para tomar el sol y tratamientos de belleza.
10. Hotel Balneario Termes Victòria (Caldes de Montbui, Barcelona)
Los orígenes del Hotel Balneario Termes Victòria, a 25 kilómetros de Barcelona, se remontan al siglo XVII. A lo largo de los años se han hecho varias reformas arquitectónicas, pero siempre conservando elementos originales como la galería del centro termal del siglo XVIII, las baldosas de los suelos de los salones y las vidrieras del comedor. Una ubicación privilegiada con vistas a la montaña que combina el relax y la tranquilidad con la comodidad de pasear por las calles del casco antiguo y disfrutar de comercios, bares y terrazas. El agua surge a una temperatura de 74ºC, la más elevada de la Península Ibérica, aunque lo más importante de sus aguas son los minerales que lleva, son cloruradas sódicas y fluoradas. Esta tipología de aguas es apropiada para terapias de estrés, recuperación de fracturas, reuma, artrosis y artritis.
11. Balneario de Mondariz (Mondariz, Pontevedra)
Con más de 3.000m2 dedicados al relax y al ocio a través del agua, el Palacio del Agua es uno de los productos estrella del Balneario de Mondariz, un gran spa pensado para disfrutar tanto de manera individual, como en pareja, en grupo o con los niños. En cada sesión se puede disfrutar de la instalación de manera libre durante un tiempo máximo de 3 horas, pasando por su piscina activa con camas de agua, bancos de hidromasaje, cuellos de cisne, contracorrientes, chorros verticales, géiseres, hidromasajes a diferentes alturas y su gran cascada en lámina de agua. Fuera de la piscina tiene hasta 6 saunas con diferentes aromas y grados de humedad, jacuzzis, sala de pediluvios y una poza de agua caliente al aire libre. Una de sus ofertas más originales es el llamado Circuito Celta que lleva a conocer y sentir la cultura termal de 2.000 años atrás.
12. Hotel Balneario El Raposo (Badajoz)
Es uno de los pocos balnearios especializado en aplicación de lodos naturales, que proceden del curso del arroyo cercano al balneario. Situado en Puebla de Sancho Pérez, muy cerca de Zafra en el sur de la provincia de Badajoz, dispone de unos magníficos jardines exteriores con 30.000 m2 de abundante vegetación. Las aguas del Balneario El Raposo son bicarbonatadas, cálcicas y magnésicas. En el recorrido por el circuito spa, se encuentran instalaciones como la piscina climatizada activa con circuito termal, aerosoles para tratamientos respiratorios, pulverizaciones, ducha nasal, nebulizadores, baños de agua minero-medicinal y lodo, estufas de vapor, bañeras de hidromasaje, pediluvios, maniluvios, chorros a presión, parafangos, presoterapia, infrarrojos, columnas de chorro, cura hidropínica, salas de reposo y solariums. Y por si fuera poco, ofrece su magnífico Restaurante Matanegra, con especialidades extremeñas.