La exposición muestra 33 piezas originales de la colección Mutis algunas de ellas nunca expuestas.
El Real Jardín Botánico (RJB) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) presenta La exposición Mutis. Un patrimonio compartido, fruto de la cooperación entre el Real Jardín Botánico de Madrid y la Biblioteca Nacional de Colombia cuyo objetivo es visualizar la estrecha relación entre la colección de dibujos de la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada dirigida por José Celestino Mutis y la biblioteca que formó este sabio gaditano, y poner en valor este patrimonio compartido entre ambas instituciones de los dos países.
La presentación de esta exposición cuenta con Esteban Manrique, director del RJB-CSIC; Diana Patricia Restrepo, directora de la Biblioteca Nacional de Colombia; Pura Fernández, directora de la Editorial CSIC y responsable de Cultura Científica del CSIC; y Esther García Guillén y María Esmeral, comisarias de la muestra.
La exposición muestra 33 piezas originales procedentes del Archivo y Herbario del Real Jardín Botánico, algunas de ellas nunca expuestas, entre las que destacan 17 dibujos en gran folio de la colección Mutis, además de manuscritos, estampas y un cajón original de la Expedición. Se acompaña de once reproducciones de estampas contenidas en libros del fondo bibliográfico Mutis de la Biblioteca Nacional de Colombia. Y también se presenta una obra de Salvador Dalí, igualmente poco conocida e inspirada en uno de los dibujos de la colección de Mutis.
José Celestino Mutis (Cádiz, España, 1732 – Santa Fe de Bogotá, Colombia, 1808) fue un sacerdote, cirujano y botánico que desarrolló la mayor parte de su carrera científica en el Nuevo Reino de Granada. Bajo el deseo de elaborar una Historia Natural de toda América hispana, lideró la expedición botánica más dilatada de las organizadas por la corona española en los siglos XVIII y XIX: la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada. Mutis estudió cirugía y medicina en Cádiz y Sevilla e inició su práctica médica en Madrid, como médico de cámara de la Corte, donde también se formó en botánica en el Real Jardín Botánico de Madrid, fundado por Fernando VI en 1755. En 1760 viajó al Reino de Nueva Granada como médico del virrey Pedro Messía de la Cerda. En América, Mutis simultaneó su actividad médica con estudios de minería, matemáticas y astronomía y se ordenó sacerdote en 1772. La expedición En 1783, primero por orden del virrey Antonio de Caballero y Góngora y después avalada por Cédula Real, se pone en marcha la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada, que Mutis dirigirá hasta su muerte, en 1808. Los trabajos de la expedición continuaron hasta 1816, promovidos por sus sucesores. Los primeros meses se desarrollaron en el lugar llamado Mesa de Juan Díaz, a 62 kilómetros al suroeste de Bogotá, donde se hicieron varias exploraciones. De allí pasaron a Mariquita, zona de gran riqueza de flora y fauna, en donde permanecieron desde 1783 a 1790.
Además de la flora, se estudiaron otros aspectos, como la canela silvestre, el té de Bogotá y la quina, y se reconocieron las minas de aquella zona. El equipo estaba integrado por naturalistas, pintores, recolectores, geógrafos y personal ayudante. En Mariquita, Mutis organizó un importante taller de pintura compuesto por ocho artistas que realizaron 1.200 láminas, 600 de ellas en color. El resto de los dibujos (más del 80%) fue ejecutado durante el periodo siguiente, en Santa Fe, desde 1790 a 1816. En 1816 los materiales procedentes de la expedición fueron enviados a Madrid en 105 cajones. Tras ser examinados por Fernando VII fueron destinados al Gabinete de Historia Natural (los minerales y los animales) y al Real Jardín Botánico (los vegetales y los manuscritos). En 1889 la documentación no relacionada con la Historia Natural pasó a la Biblioteca de la Academia de Historia. El desarrollo de la Expedición Botánica tuvo una gran repercusión en la conformación y orientación de una comunidad científica y de los estudios botánicos en Colombia. Además, tanto las láminas como el herbario han supuesto una fuente constante de información para el avance del conocimiento de la flora tropical.